domingo, 29 de enero de 2017

Informativo semanal 28 de enero 2017


Informativo Semanal (28/1/2017)
1. Oración y Mensaje de Año Nuevo de los Padres Verdaderos
2. Noticias del Mundo
- Actividad de los Mesías Tribales (Kenia: Festival Tribal de Amor Verdadero / Nepal: Seminario “Transformativo” del PD / R.D. Congo: Bendición y educación por Mesías Tribales / Ghana: Seminario sobre Educación Familiar)
- Iniciativas de Paz (FMPM: Academia de Mujeres por la Paz en el Exterior / Rusia: Peace Road Invernal 2017)
- Actividades Juveniles (Corea: Primera Graduación de la Academia Global HJ Sunhak / Brasil: Asamblea General de CARP Hyo Jeong 2017 / Benín: Festival de CARP)
- Otras Noticias (Corea: Conferencias Sueños de Esperanza en todas las Regiones / Japón – Reunión Nacional de Líderes 2017 / Nepal: La TV Pública trasmite el Servicio Dominical / Grupo Tongil: Entrega de Donación Sueño de Esperanza / Senegal: Dedicación de la Sede y Tierra Sagrada)

sábado, 28 de enero de 2017

El momento crucial de la historia 1975

El momento crucial de la historia
1 de diciembre de 1975
Tarrytown, Nueva York
Reverendo Sun Myung Moon 

En la historia del mundo, la dispensación de la restauración se ha repetido tres veces debido a los fallos humanos. Originariamente, no debería haber habido una dispensación de restauración. La necesidad de la restauración y las subsecuentes repeticiones radican en último en un solo incidente: la caída. Dios, Satán y el hombre se han encarado el uno con el otro. Su interacción ha constituido la historia, por una parte, el  lado celestial lidiando para fijar puntos de cambio que restaurasen la posición original, por otra parte, el lado satánico luchando para mantener su dominio. El asunto siempre ha sido determinar si Dios o Satán ganarían la transición victoriosa.
Las religiones existentes nunca se han dado cuenta de que el hombre tiene una responsabilidad crucial en transformar el mundo del mal. Han creído que si Dios deseo algo se cumpliría. Han asumido que si Dios anhela algo, Satán no podía oponerse.  La teología de unificación dice que el hombre mismo debe hacerse responsable. Decimos que no podemos tener éxito en el giro transicional a no ser que echemos a Satán. El hombre debe tomar la iniciativa, ser un líder. Dios, por Su lado, trata de restaurar al hombre mediante gente buena. El lado del mal se opone a la restauración usando gente mala. La historia ha progresado basada en la repetición de estas luchas.
Caín representa el lado de Satán mientras que Abel el lado de Dios. No pueden evitar el choque. El lado de Dios representa el lado interno, el lado de Caín el lado externo. Caín y Abel experimentaron  esta lucha, y en la misma, Satán finalmente salió ganando. Si hubiera ganado el lado de Dios la historia se hubiera dirigido en ese momento de transición hacia el bien.
En tiempos de Noé y Abraham, Satán ganó más batallas y pudo frustrar los intentos de provocar el giro transicional hacia el bien.  En cualquier momento de giro transicional en la historia, el cielo siempre ha luchado basado en tres etapas o generaciones representando el testamento Antiguo, el Testamento Nuevo y el Testamento Completo,  o las etapas de formación, crecimiento y perfección. Abraham, representando la humanidad, trató de provocar un cambio completo haciendo una ofrenda simbólica. Pero debido a que no cortó las palomas en dos, la condición no fue establecida. El curso de la familia de Abraham paso entonces por tres etapas, de Abraham  a Isaac y Jacob. Y finalmente, por primera vez, se logró un giro transicional victorioso en el tiempo de Jacob.
Jacob marca el momento crucial
Cuando Jacob ganó la victoria por primera vez, toda su familia pudo seguir el camino al cielo. ¿Cuál fue el siguiente reto? ¿Qué es siempre crucial después de empezar una nueva tradición? Pasarlo a los descendientes.
La nueva tradición que sus descendientes debieron seguir era el  pensamiento, la fe, y las acciones con las que Jacob consiguió la victoria. Jacob, aunque era un individuo, puso las condiciones de indemnización representando la historia. Por tanto, el giro transicional que él consiguió,  tuve que pasarse  a la familia y a la tribu. Tuvieron que heredar la tradición con la que Jacob  consiguió la victoria. Este es el curso de Jacob que estudiamos en el principio.
Pero para que el pueblo de Israel pudiese heredar la victoria histórica sobre Satán tenían que seguir el camino de su familia a lo largo de la época de Moisés. No importa lo difícil que fuera su curso, tenían que observar esta regla en tiempos de Moisés. Tenían que aplicar esta norma a dondequiera que fueran, no sólo en los límites de sui país. Además, tenían que lograr el giro transicional en el nivel de raza o de pueblo en tiempos de Moisés.
 Satán siempre está un paso adelantado. En el país forastero de Egipto, Dios y la gente de Dios tuvieron que vérselas con Satán,la gente y el país de Satán. Cuando Dios pudo reunir a Su pueblo, Satán ya tenía una nación. Satán tenía el mundo. Siempre luchar de esta manera desproporcionada. Moisés, a pesar de ser Israelita, era el un jefe en el palacio del Faraón.  En el palacio, al representar a loa egipcios, era un hombre del lado de Satán. Pero Moisés abandonó el palacio y cambio. El día que cambió, Moisés formó parte del pueblo de Israel, del lado de Dios. Ya no era el Moisés del palacio, morando en el lado de Satán.
Moisés pudo poner el fundamento de su raza, su pueblo en los 40 años en el desierto de Median. Moisés y el pueblo se unieron y lucharon contra el palacio del Faraón. El lado de Dios  y el lado de Satán lucharon y el lado de Dios sometió al lado de Satán. Los israelitas viajaron tres días antes de alcanzar el Mar Rojo. El periodo de tres días también fue significativo en tiempos de Jacob cuando volvió a Canaán.   
Después de ganar esas batallas, la gente israelita empezó su éxodo, poniendo fin a 400 años de esclavitud en Egipto. No obstante, no fueron directamente a Canaán, sino que erraron 40 años en el desierto. ¿Por qué fueron por este curso? Debido a que los israelitas no estaban dispuestos a arriesgar sus vidas para conseguir la meta.  No pudieron centrarse sólo en Dios. Su forma de pensar era humanista y ligado aún al mundo satánico.
La victoria que Moisés obtuvo en Egipto fue  la tradición que el pueblo de Israel tuvo que heredar desde el momento en dejó atrás a Egipto hasta que volvieron a Canaán y establecieron el fundamento nacional, esperando  al Mesías. A no ser que siguiesen y obsediesen de todo corazón ésa tradición, no podrían heredar el fundamento de victoria
como pueblo o producir el momento de cambio a escala nacional.   Este fundamento era crucial ya que de la ampliación del mismo dependía la llegada de Jesús a escala nacional y la inauguración de la era mesiánica.
La escala nacional es un paso superior a la de pueblo. La nación consiste de familias y estirpes. En consecuencia, en la era nacional, las condiciones para restaurar familias  y estirpes no tenían que ser repetidas individualmente. Por tanto, cuando Jesús vino como Mesías, bastaba con poner el estándar nacional exitosamente para lograr los requisitos de restauración familiar y de estirpe.
¿En qué se centró Moisés para cumplir la restauración del pueblo o la estirpe? En heredar la tradición de Jacob, de los padres. Debéis entenderlo. Moisés heredó la tradición que Jacob dejó tras de sí, y representaba la siguiente meta en el proceso de desarrollo desde Jacob. En el proceso de desarrollo, no puede hacer etapa de crecimiento sin etapa de formación, ni etapa de perfeccionamiento sin etapa de crecimiento. Por tanto, si la era de Jacob fue la etapa de formación,  Moisés vino sobre ese fundamento en la etapa de crecimiento. En el proceso vertical de la historia,  Moisés heredó el pasado a la vez que figuraba el presente. El giro tradicional apuntaba hacia el futuro. Así pues, Moisés se decidió  i r hacia adelante. A partir de este giro transicional se determinaron los conceptos de pasado, presente y futuro.
La familia de Jacob pasó por las etapas de formación y crecimiento, avanzando al nivel de completa fe. Siguieron la formula de tener éxito erigiendo tres etapas, pasado, presente y futuro.
Sin hacer condiciones Moisés no podría decirle sencillamente a la gente” ¡Vamos a Canáan!”  Podía empezar a formar una nación sólo después de haber pulido todos los fallos cometidos desde el tiempo de Jacob hasta el suyo poniendo un fundamento que prescindiera de Satán.  La formula es el mismo. ¿Qué hacer después de entrar en la era nacional? Jesús debía apoyarse sobre el fundamento victoria de Moisés. Ya que el fundamento de Moisés era el del pueblo, Jesús no podía tener éxito  sin heredar la posición de Moisés, eliminando toda condición de invasión satánica.
La nación de Israel y la gente que Moisés guió debía convertirse en el fundamento para Jesús. Por eso, todos los fallos del tiempo de Moisés deberían ser limpiados en el tiempo de Jesús. Una vez que hubiera preparado y limpiado el fundamento del pueblo y lo hubiera conectado con el fundamento nacional, Jesús podía subir a escala mundial.  Sólo de esa manera podía Jesús ir as una dimensión más elevada.
Ya que el giro transicional sólo puede hacerse cuando se asegura la tradición del nivel anterior, cuando no se garantizó el fundamento nacional en tiempos de Jesús, la posibilidad de restauración mundial se perdió. Todas las condiciones establecidas internamente en Dios y externamente en Jesús, debería haber creado el fundamento nacional con  el que hacer frente a Roma y al mundo satánico. Si hubieran creado un giro transicional nacional, la nación de Israel habría existido eternamente en la tierra.
Después del tiempo de Jesús, tanto judíos como no- judíos deberían haber seguido la tradición de Jesús, uniéndose y creando un fundamento nacional. ¿Qué ocurrió con la muerte de Jesús? ¿Se perdió el giro transicional en la tierra o se mantuvo?
El Cristianismo
Los cristianos actuales dicen que todo está hecho con sólo creer en Jesús. No es así empero. Por la muerte de Jesús en la cruz, los cristianos perdieron el fundamento terrestre con el cuál restaurar el pasado, presente y futuro desde el nivel individual hasta el nacional. ¿Dónde deber acaecer el giro transicional? Deber ocurrir en la tierra. Debido a que un ser de carne y espíritu cayó, personas de carne y espíritu deben regresar a Dios como individuos, familias, tribus, naciones y el mundo.  A causa de la muerte de Jesús, todos esos niveles fueron perdidos.
Los seguidores de Jesús deberían haber creado el fundamento espiritual que abarcara el mundo en aquel tiempo. Fue el tiempo adecuado para provocar el giro transicional en la tierra y saltar a escala mundial. La muerte de Jesús impidió el camino hacia las etapas nacionales y mundial empero y los cristianos tuvieron que iniciar un movimiento espiritual para lograr el ideal de Dios. ¿Puede el cristianismo heredar la tierra? Ante todo debían entender la situación de Jesús y heredar su traición.  Debéis entender que a causa de la muerte de Jesús el cristianismo se convirtió en un movimiento espiritual. ¿Cuál es la victoria espiritual de Jesús? Significa que se estableció un ambiente victorioso espiritual en el que los seguidores no son violados espiritualmente en la tierra. Lo que los cristianos deben saber es que por qué Jesús oró:” Padre mío, si es posible que pase de mí esta copa, pero no se haga como yo quiero sino como Tú quieres”. De aquí podemos deducir que los cristianos no pueden lograr el ideal de Dios sin unirse con  la Voluntad del Padre Celestial, tal y como Jesús oró en el huerto de los olivos.
Está claro que con la muerte de Jesús Dios perdió el fundamento terrenal establecido por Moisés. Externamente las circunstancias empeoraron más que antes de la venida del Mesías.  Los cristianos, el segundo Israel, no tienen una nación, una tierra. Son como los miembros de una familia sin la cabeza de familia. No hay garantías de que Dios pueda proteger a la gente por el que preparó el fundamento individual, de familiar, tribal  y racial.  A pesar de que Dios es todopoderoso, no tenía fundamento para defender al segundo Israel. Por eso el cristianismo ha sufrido miserablemente en la historia de las religiones. El cristianismo ha sido una religión de mártires. La gente se preguntaba que si  Dios realmente existe, entonces ¿por qué tuvieron los cristianos que padecer un camino de tanto sufrimiento como individuos y como grupo? Podemos darnos cuenta de que Satán tiene derecho a  atacar físicamente siempre que no hay un fundamento para el individuo, la familia,  el clan o la nación en la tierra.
La Segunda Venida
¿Debe Jesús retornar? Absolutamente. Muchos cristianos dicen que da igual si el Mesías viene o no, que no es necesario. Otros creen que vendrá en las nubes y que achicharrara todo, y que el mundo será transformado sin más, tal y como Jesús y Dios desean. ¿Ocurrirá de esta forma? Estos pensamientos cristianos se apartan demasiado de la historia de restauración y perecerán. Las personas con este tipo de fe nunca podrán ver al Señor de la Segunda Venida
¿Vendrá el Señor de la Segunda Venida en la gloria? ¿Tiene la autoridad para superar lícitamente al individuo, la familia, y la nación satánicas? Para venir sobre un fundamento nacional el Mesías debe heredar antes el fundamento de un pueblo. Pero antes de eso, debe primero crear un fundamento familiar perfectamente purificado. Sólo entonces podrá descansar firmemente en el fundamento nacional. Sin esta base el Señor de la Segunda Venida  no podrá venir en la gloria. Así se cumplirá la profecía que vendrá padeciendo mucho.
La situación actual del cristianismo es como nubes flotando en el aire. Cuando el viento sopla las nubes se desplazan. El cristianismo es la religión nacional de muchas naciones. Pero no poseen una victoria terrenal en el plano individual, familiar, o tribal. No han establecido una nación escogida.
¿Entonces, cuál será la tarea que el Señor de la Segunda Venida debe desempeñar cuando venga?  No puede alcanzar o salvar el mundo a no ser que recree un fundamento substancial en el nivel individual, familiar tribal y nacional, todos ellos perdidos por la nación de Israel. Sin reconstruir esos niveles no puede consumar el cristianismo mundial.
¿Dónde se ha asentado el cristianismo, errando por 2.000 años? ¿Pensáis que algo se asienta exitosamente en los EEUU cuando no lo  ha logrado en ningún otro sitio? 
¿Dónde pude Dios obtener Su base? La dispensación no tuvo éxito en Roma, o en Inglaterra, ni tampoco en la nación cristiana de los EEUU. Por eso, Dios preparó Su base en una pequeña nación de Asía. Necesitaba encontrar una nación que tuviera una larga historia de más de 4.000 años. Tenía que ser una pequeña nación de un tamaño manejable. Necesitaba una nación con un pueblo homogéneo. Tenía que ser una nación que nunca hubiera invadido a otra, y su gente debía poseer una cultura distinguida. Tenía que ser una nación que conserva un legado nacional fuerte, a pesar de haber sido un  estado dependiente o haber sufrido una situación inestable. También, la gente de esa nación debe haber padecido mucho porque debe indemnizar el sufrimiento del mundo.
La nación escogida
En la historia, sólo dos naciones han cumplido esas condiciones. Una es Israel. Los israelitas estuvieron errando sin una nación. Con el fin de recibir al Mesías, empero, perseveraron como una nación sin territorio a pesar del trato severo y la persecución. La otra nación es Corea, los coreanos han sido llamados los judíos de Asia. Corea ha podido asimilar la cultura occidental sin ser minorado por la misma. Ha sido dominado por el lado satánico, al igual que Israel que fue gobernado por Roma.
En 1948, Israel ganó la independencia  y por eso algunos creen que el Señor volverá a Israel. Pero Coreo también se independizó en 1948. En contraste con la situación israelita, Corea fue liberado de la colonización japonesa, empero. Pasiblemente, ambas naciones puedan haberse independizado a la par debido a que el Israel físico heredó algo del Israel espiritual, Corea. El hecho que los judíos, que vagaron por 2.000 años, pudieron encontrar de nuevo su nación, significa sus pecados fueron perdonados. Por eso, pudieron volver a su patria originaria. La profecía que Israel sería restaurado cuando Jesús vuelva, ha sido cumplida. A causa de que la muerte de Jesús fue restituido, la humanidad pudo recibir perdón y la Segunda Venida pudo producirse.
¿Pensáis que el Señor de la segunda Venida tendrá una vida ostentosa o que pagará mucha indemnización si viene a Corea?  Debe resistir muchas cosas yendo el camino de la indemnización, debe desarrollar mucha perseverancia. Los coreanos, que les gusta la comida picante, describen a tal persona como”alguien que puede comer pimientos sin  llorar”.
Se puede comparar la situación de los cristianos coreanos a la de los líderes judíos del pasado, exceptuando que cristianos sólo disponen de una base espiritual flotando en el aire. La mente o el espíritu va donde está el cuerpo, si los cristianos encuentran a un grupo que recibe al Mesías,  el espíritu podría bien moverles a seguir ese grupo. Puede que el Mesías aparezca mediante un movimiento nacido en Corea, que carga con la misión histórica de Dios. ¿Cuál es ese movimiento? El movimiento de unificación  es el foco del Espíritu de Dios  e intenta unir el cristianismo y al mundo.
El curso del Mesías
¿Qué significa todo esto?  Significa que el Mesías ha venido. Si en vez de oponérsele la gente le hubiera aceptado, el proceso de restauración hubiera acabado en siete años, las condiciones de indemnización para la familia, la tribu, y la nación hubiera unido todos los niveles. La independencia corea fue declarado en 1948, siete años después de la liberación de Japón en 1945, en  1952, la restauración podría haberse realizado. Dios acabó la creación en una semana, descansando en el séptimo día. ¿Qué hice en esos siete años? Estuve en la cárcel. Permanecí allí y permanecí allí hasta que fui liberado en 1950. Los discípulos de Jesús se dieron a la fuga  cuando tuvo que enfrentarse a la crucifixión. Cuando estuve en la cárcel pude, empero, encontrar a 12 discípulos. De esta manera, la restauración por indemnización  pudo iniciarse. Empecé  a predicar en el ámbito democrático, pero los cristianos se opusieron a mí. También representaba el fallo de la democracia en aquel tiempo.  Debido a que me encontré con hostilidad doméstica en Corea del Sur, me vi obligado a ir al campo enemigo, la Corea del Norte, controlada por el comunismo, para recupera lo perdido.
Familias bendecidas restauradas
A partir de ese momento, la recreación pude empezar de nuevo. Trabajé para formar una familia desde la posición de Jacob, o a nivel individual. Empecé mí familia en el año 1960, 14 años tras la liberación de Corea. Para restaurar los fallos cometidos en el tiempo de Jesús, pasé las etapas de formación y crecimiento, comprendiendo cada etapa siete años. Jacob también trabajó 14 años para establecer su familia. Por tanto, en el año 1960 la familia de Dios pudo empezar a separarse de la familia de Satán.
Quise formar familias a escala mundial, creando la nueva dimensión de bendición del nuevo Israel.  El tercer Israel se compone de familias bendecidas. A partir de 1960 alcanzamos el nivel mundial de restauración, pasando por el proceso histórico de la era de la familia, de la de clan, de la tribal, y la era de la nación.
Hasta ahora, la iglesia de unificación ha estado formando clanes y tribus centrado en las 12 parejas que representan las familias de Jacob. Las 36 parejas representan  tres etapas de 12 parejas. Un proceso de restauración implica 36 parejas, una familia es la extensión de 36 generaciones. Si añadimos las familias de Caín y Abel, sumamos 72 parejas. Por medio de la bendición debemos encontrar a las familias históricas originarias que se perdieron, y debemos restaurarlas. 
Jesús, para cumplir la Voluntad de Dios, debería haber bendecido primero  tres discípulos  y luego el resto de los doce. Nosotros también debemos complementar el número 12. Si se amplía este número horizontalmente mediante el pasado, presente y futuro, deviene 36 parejas.  Si ampliamos las etapas de formación., crecimiento y cumplimiento horizontalmente,  también obtendremos 36 parejas.
Hubo 10 generaciones de Adán a Noé y otras 10 de Noé a Abraham. Este número 10, al incluir a Caín y Abel o Isaac y Jacob, presupone el número fundamental 12, empero. Si multiplicamos por las tres etapas de formación., crecimiento y cumplimiento el número 12,  nos da el número 36. Éste es el origen de las 36 parejas bendecidas.
Multiplicado por el nivel de Abel y Caín los 36 parejas devienen 72, representando una tribu. La siguiente escala de bendición es el número 124. Corresponden a los 120 discípulos con las que Jesús emprendió su curso espiritual. Son los representantes de las naciones del mundo. La intención de Jesús  fue bendecir e unirlos, conectándolos a la nación de Israel. ¿Si Jesús hubiese bendecido a sus 120 seguidores y si la nación de Israel le hubiese recibido, hubiese sido matado? Por supuesto que no. Tuvimos que restituir lo que él no consiguió y bendecir a 36, 72 y 124 parejas en tres años.
Después vienen las 430 parejas. Los números 4 y 3 suman 7. Los  números 4 y 3 simbolizan siempre una liberación. El pueblo de Israel inició su éxodo a la tierra  prometida después de 430 años. En la historia coreana, la liberación de Corea ocurrió en el año 4300, según el calendario coreano. Después de 4300 años, Corea pudo ser la nación escogida. Por tanto, 430 años es el periodo para la restauración de la nación de Israel. Cuando el fundamento alcanzó la escala nacional, bendije a 43 parejas del mundo occidental. El número 43 es un submúltiplo del número 430.
La bendición de 777 parejas fue la siguiente, con personas de 10 naciones. Ésta bendición abrió el camino al nivel mundial. La iglesia de unificación esta formando una nueva tribu y una nueva nación. ¿Entendéis lo que está pasando? Si no comprendéis lo que esta pasando hasta el momento no entenderéis la dispensación que viene a partir de ahora. Debéis heredar y observar la tradición, pero ¿cómo lo haréis si ni siquiera la entendéis?
En febrero de 1975 bendije a  1.800 parejas. Debí celebrar esa bendición dentro de los 14 años tras el inicio de la dispensación en abril de 1960. La bendición de 1.800 parejas cerró el segundo curso de siete años de la iglesia de unificación ya que preparó el fundamento perfecto para extendernos a escala mundial. Seis es el número de Satán, 1.800 es un múltiplo del número 18, que es total de la suma de tres seises. Representa el dominio del mundo satánico. El primer seis representa la etapa de formación del lado satánico, el segundo seis representa la etapa de crecimiento del lado satánico y el tercero seis representa la etapa de cumplimiento del lado satánico. Así se preparó el fundamento mundial, por eso, a partir de ahora podemos movilizar la nación y el mundo.
La concentración de Yoido
Centrado en la concentración de Yodio del pasado junio en Corea, celebramos varios mítines. Los preparativos empezaron en febrero, y el evento alteró por completo la fortuna de Corea. Tuvimos que invertir la trayectoria de las iglesias establecidas y también conseguir victoria en otras áreas. Estas actividades han enlazado a Corea con los niveles del individuo, de la familia, de la etnia, de  la nación y del mundo. Este vínculo  espiritual ha dado a Corea  un fundamento sustancial a escala mundial.
Pudimos abrir el camino para llegar al mundo conectándonos espiritualmente mediante condiciones tales como el curso de tres años en los EEUU desde el año 1972 al 1974. Antes de eso, trabajábamos a escala tribal e étnico.  No obstante, a partir del año 1972 he enviado a miembros al mundo trayendo una victoria espiritual a través del curso de tres años en los EEUU:
Para extendernos a escala mundial, ahora que el estándar nacional está establecido, en los tres años siguientes debemos fundar el estándar del mundo cristiano sustancial, vinculándolo al fundamento del cristianismo espiritual.  En los tres años que siguen debemos movilizarnos a escala mundial enlazando el fundamento sustancial con el espiritual. Este periodo corresponde, a escala mundial, con los tres años de misión pública de Jesús.   
El fundamento para que todo esto ocurra ha sido el mitin de Yodio. Con ello, alcanzamos el nivel de las iglesias establecidas y de la nación y preparamos un fundamento  victorioso tanto espiritual como físicamente. El curso providencial de tres años empieza aquí en los EEUU.
Los tres años venideros
Espiritual y físicamente, es el momento de transición, de cambio para el mundo. Debéis entenderlo. A lo largo de esos tres años, es decir, 1975, 1976 y 1977, el destino de los EEUU cambiará, y con el también el del mundo.
En Corea he estado restaurando por indemnización todo lo que se perdió en Israel. Preparé y completé el fundamento nacional a nivel espiritual y físico, mediante el mundo cristiano. También he puesto las condiciones de indemnización para el nivel mundial.
En estos tres años primeros debemos crear el fundamento espiritual y en los siguientes tres años el fundamento físico. Por tanto, desde 1977 a 1981 debemos indemnizar completamente los problemas del mundo y resolverlos. En los primeros tres años hasta 1977, debemos obtener cierta victoria, y por el año 1981 debemos haber liberado a la iglesia de unificación de cualquier oposición en el mundo democrático. Puede que el mundo comunista siga resistiéndosenos, pero en lo que se refiere al mundo libre deben recibirnos bien en cualquier parte. Esto se determinará por lo que logremos en los EEUU.
¿En qué tiempo estamos viviendo? Referente al giro transicional histórico, hemos heredado de la era cristiano el fundamento nacional. Debemos añadir asimismo el nivel mundial, no solo espiritual sino también físicamente. El destino del fundamento mundial se asentará en el principio de  restauración por indemnización. Por tanto, debéis entender que los años 1975, 1976 y 1977 son los años cruciales de giro transicional en la historia. Vivimos ahora ese momento.
¿Cómo vamos a influenciar en estos tres años venideros a los EEUU? ¿Qué debemos hacer? Dios ha dejado de enfocar a las iglesias cristianas y ha aparecido la iglesia de unificación. Debemos tener una visión providencial clara de la historia. Debemos entender no sólo la teoría sino también la realidad de la historia.  Jacob anduvo el curso providencial sin entenderlo demasiado. Ni Moisés ni Jesús hicieron sus cursos providenciales con pleno conocimiento de causa. Pero nuestra situación es distinta. Nosotros comprendemos todo, por consiguiente, debemos ser capaces de hacerlo. La etapa de formación es de Adán, la de crecimiento de Jesús y la nuestra es la etapa de cumplimiento.  Por eso, deberíamos entender claramente la situación de Dios.
He defendió a una nación, que es Corea, no los EEUU. No podremos restaurar el cristianismo y el fundamento espiritual a no ser que volvamos a encontrar la sustancia física de nuevo.  ¿Si retrocedéis en las eras, quién tenía la situación más idónea, Jesús y sus discípulos, o vosotros? La época de Jesús era en el nivel tribal o nacional, nosotros, en cambio, nos afirmamos en el nivel mundial. ¡Es un tiempo tan extraordinario! Debéis entender que en teoría deberíais ser mayores que ellos. Los cristianos primitivos estaban dispuestos a ir a Roma sabiendo que serían inmolados. ¿Qué haríais si supieseis que seríais inmolados en Moscú?  ¿Sois superiores a los discípulos de Jesús?
¿Por cuántos años deberíamos trabajar para salvar el mundo democrático? Debemos trabajar muy duramente los próximos tres años, y lograr tanto como podamos para  ganarnos al mundo comunista en un periodo de siete años. Di lo hacemos el mundo democrático podrá vencer al mundo comunista sin necesidad de lucha. Si no lo logramos, habrá lucha tras lucha. En ese caso, los miembros de la iglesia de unificación deben ir a la victoria aunque haya que verter sangre. Por consiguiente, debemos resolver los problemas mundiales por todos los medios. Mi deseo más sincero es siempre ese esté despierto o dormido. Dios y Jesús también anhelan lo mismo. Muchas personas espirituales dependen de nosotros para conseguir esta victoria adicional. Nosotros y el mundo espiritual estamos orando por esto. En el pasado el mundo espiritual no podía asistirnos plenamente, pero ahora pueden absolutamente participar Todo depende de que nosotros abramos el camino. ¡Qué cerca está el Reino de los Cielos! Nos quedan siete años.
El estadio de los Yankees
¿Cuáles son los momentos de cambio en esta batalla? La conferencia del Madison Square Garden produjo un cambio espiritual. El reto es ahora el mundo exterior. La conferencia del Madison Square Garden es la etapa de crecimiento. La victoria mundial se jugará en la próxima conferencia en el estadio Yankee. Normalmente, el momento transaccional en la providencia es la segunda etapa. En la familia de Adán, la providencia se centró en Abel, el segundo hijo. A escala familiar, los cielos y la tierra fueron divididos centrado en Noé.  La segunda etapa es la más crucial. En la familia de Abraham, se tuvo que tomar una decisión de vida o muerte en torna a la segunda generación, Isaac. Jesús, el segundo Adán, intentó, en  un ámbito mayor de la historia, darle la vuelta a la historia, pero no pudo. Visto tanto horizontal como verticalmente, la segunda etapa está en el centro.
El momento de transición a escala mundial es ahora la conferencia clave del estadio de Yankee. El número siete representa la formación, catorce el crecimiento y veintiuno el cumplimiento.  Por tanto, si podemos reunir a 210.000 personas en el estadio Yankee seremos victoriosos. Lograr eso equivale a revitalizar los EEUU. Por eso, lo conseguiremos a riesgo de nuestras vidas. Debemos ganar la victoria en el estadio  Yankee. Debemos concentrarnos en el Reino de los Cielos no sólo con toda nuestra mente, sino también con todo el cuerpo. ¡Si reunimos a todos en  el estadio Yankee, qué deleitado estarían Dios y Jesús! El mundo espiritual entero estará agradecido. Disminuirán los grupos que se nos oponen.
Debéis entender que me encuentro en una posición seria. Por primera vez, estoy espiritualmente sobre el fundamento mundial y ahora debo supervisar el fundamento físico. Si conseguís ser victoriosos en estos tres años venideros, por el año 1980 seremos seguramente capaces de proteger todos esos fundamentos. Podremos testificar ante Dios que pudimos resolver todos los problemas del mundo sin lucha. Si podemos traer a más de 200.000 personas al estadio Yankee, triunfaremos en el monumento Washington y conseguiremos 600 o 700.000 personas. Cuando 600.000 personas me apoyen, el nuevo Israel podrá ir rumbo a Canaán.  
Crearemos el fundamento mundial en estos tres años. Estamos restaurando por indemnización. En Corea congregamos a 1.200.000 personas en una concentración en la isla de Yoido. Si tenéis el mismo corazón que Jesús y os unís en un esfuerzo desesperado el mundo espiritual será movilizado y obtendremos la victoria. La gente se sentirá atraída inconscientemente al estadio yankee. Os querrán seguir en cuanto os vean. Serán llevados por el mundo espiritual. Por eso, debemos hacer nuestro mejor. Es la batalla final. No existió antes ni volverá nunca. Dios, Jesús y yo estamos serios, los cristianos en el mundo espiritual y vosotros miembros de la iglesia de unificación estáis serios. Los que pasaron al mundo espiritual creyendo en el cristianismo vendrán en nuestra ayuda. Después de que los cristianos penetraron en Roma, la persecución no duró mucho.  Si ganamos la victoria en el estadio yankee, no habrá tanta oposición. De alguna manera, la gente se sentirá atraída hacia la iglesia de unificación y vendrán a observar qué somos y qué hacemos.
La victoria del estadio Yankee nos pondrá por encima de la etapa de crecimiento. Es equivalente a ir más allá del ámbito de la caída. Puesto que establecerá la autoridad de Dios a escala mundial, Satán no tendrá a donde ir. En consecuencia, nuestros enemigos no podrán oponérsenos. Todo eso se decidirá en el estadio Yankee. Me siento, en cierto sentido, desesperado. ¿Qué ocurrirá si fracasamos? Ese punto me preocupa mucho. Lo debéis entender. Debemos lograrlo por todos los medios, pase lo que pase.
Los EEUU tendrán pronto 200 años de edad. Comprendemos que la providencia de Dios se desarrolla mediante periodos de tiempo  paralelos. Los primeros  cristianos restauraron por indemnización los 4.000 años de historia humana, perdidos en tiempo de Jesús, durante los 400 años de persecución del Imperio Romana. Ahora les toca a los EEUU restaurar los 2.000 años  perdidos por el fallo del cristianismo. Esos 200 años deben consumar espiritual y sustancialmente la providencia desde Jesús, resolverlo todo, y devolverlo a Dios. Esos 200 años son el periodo de indemnización para restaurar el espíritu y la carne de Jesús.
El t5ítulo de la conferencia en el estadio Yankee es:” El bicentenario de América, Dios bendiga a América”. Significa que estamos trasladándonos al Reino de los Cielos., superando la cima de la segunda etapa providencial. Incluso mientras durmáis, hacedlo con la mente puesta en y dirigiendo vuestros brazos y piernas al estadio Yankee. Si pensamos de esa forma, la victoria estará asegurada. Si tenéis éxito os elevaréis. También Dios y el mundo espiritual lo harán.

Es el tiempo en que podéis centraros en los 6.000 años de historia con la máxima sinceridad y convertiros en el cuerpo resucitado de Jesús. Es un hito reciente en la historia de la providencia, que nunca jamás reaparecerá. Hacer lo mejor que podáis. Si Dios tuviera que preguntaros:” ¿No podríais haber hecho más? ” Y podéis responder:” He hecho el máximo de mis posibilidades”, vosotros y yo estaremos libre de responsabilidad. Pero si no hacéis lo mejor con la máxima sinceridad seréis objeto de resentimiento de miles de millones de generaciones. Vosotros y yo debemos unirnos completamente. Satán no se toma un descanso, ni tampoco Dios, nosotros tampoco podemos. Pensad en esos términos, y en losa siguientes seis meses, que serán el infierno final. Debéis superar seriamente todos los obstáculos. Este tiempo no se repetirá. Hagamos lo mejor que podemos y prometamos frente a Dios que en seis meses desde hoy vamos a cumplir nuestra meta. 

El valor de conocer al Mesías 1975

El valor de conocer al Mesías
28 septiembre de 1975
Barrytown, Nueva York
 Reverendo Sun Myung Moon
Hay mucha gente viviendo hoy en el mundo, pero si se les pregunta la cuestión, "¿Qué visión tienes de la vida, y qué clase de dirección tomáis en vuestra vida?" no hay ni uno que realmente pueda contestar la pregunta en la forma correcta. Lo mismo ocurre con vosotros. ¿Qué llegaréis a ser? ¿Podéis contestar a esa pregunta? Si se pregunta la misma cuestión a vuestra familia, como una unidad tendría que contestar "No". ¿A dónde va a parar el mundo? Nadie lo sabe. Todas las contestaciones son "No" o "No sabemos."
Hablemos de vuestra vida. ¿Tenéis hoy una garantía de vuestra vida? No podéis asegurar el éxito de las horas del día que vivís. No sabéis qué sucederá dentro de unas horas. Podéis estar manteniendo una conversación muy alegre, pero quién sabe, después de un segundo o dos vuestro coche puede chocar contra otro y podéis morir. Al venir aquí, no sabéis qué pudiera ocurrir. Cuando salisteis de casa previsteis algo bueno, pero algunos de vosotros podéis haber estado recelosos de venir aquí porque es muy temprano y queríais quedaros más tiempo. Algunos de vosotros, aunque estabais ansiosos por oírme, más tarde podéis estar descontentos y decir, "Bueno,¿qué aprendí concretamente?" De las 1000 preguntas que se os hacen, cuántas podéis contestar correctamente? Cuando tenéis hambre, coméis con buen apetito, pero podéis tener un dolor de estómago poco después, y puede incluso llevaros a la muerte. Los miembros masculinos, en vuestra vida pasada, estabais buscando una compañera ideal y podíais haber echado el ojo a una mujer muy hermosa, pero cuando os casasteis, esa misma persona os conducía a la infelicidad y la miseria. No hay ninguna seguridad de que alguna cosa os traiga la felicidad.
Con eso en la mente, ¿podéis pensar libremente? ¿Podéis asociaros con la gente que os rodea?¿Por muy vasto que pueda ser el universo, no os sentís ahogados y encerrados? ¿Son las cosas de tu alrededor mejores o más tristes? ¿Realmente te sientes vivo? Cantas por la mañana, gozas de comida y conversación, ¿pero realmente te sientes vivo en un mundo así?
"¿Qué clase de vida voy a llevar?" Esa es una pregunta muy grave e importante. Esta pregunta nunca nos dejará tranquilos hasta que sea resuelta. Nuestros antepasados se preguntaban la misma cuestión, en vano. La gente todavía anda a tientas en la oscuridad. Hay grandes personas en el mundo ‑grandes profesores ‑ y queréis ir a ellos para resolver esta pregunta. Os preguntáis que clase de hombre es el Reverendo Moon. ¿Puede él resolver el problema? Yo parezco ser igual que vosotros.¿Entonces a quién podéis ir a por la respuesta?¿De dónde vengo y a dónde voy? Esas son las preguntas que vosotros no podéis contestaros. Y cómo proceder en la vida personal es otra cuestión. En lo profundo de vuestras mentes buscáis entusiasmados alguien que pueda guiaros.
Dividiendo a la ligera, hay gente que sabe algo, y otros que no. ¿Pero hay más gente de los que no saben o de los que saben? La mayoría de la gente son ignorantes respecto a la vida. Solo un limitado número de gente entienden. de la vida humana. Pero incluso esos, ¿conocen precisamente lo que es la vida? (No.) Alguien puede ser capaz de darte la meta, pero guiándote hacia la meta puede llevarte en zigzag y arriba y abajo, quizás sin alcanzarla nunca. Aún entre los que entienden, hay dos clases: Aquellos que saben por la educación que han adquirido, y los que saben por intuición, que fueron enseñados por el mundo espiritual. En la historia humana, ha habido muchos profetas y santos que podían predecir la vida futura. A su lado, ha habido también muchos filósofos. ¿Cuáles de los dos han estado dirigiendo el mundo: los profetas o los filósofos? ¿Le gustan a la gente las cosas misteriosas y maravillosas, o las cosas corrientes? Os deleitáis con las cosas misteriosas y maravillosas. Podéis encontrar esas cualidades en los profetas y santos. Por eso, es muy probable que los profetas y santos son quienes van a dirigir el mundo futuro. Llegamos a la conclusión de que nosotros hoy en día vamos en busca de profetas y santos más bien que de pensadores y filósofos. La historia ha presenciado muchas cosas así. En el pasado, profetas y santos han conducido naciones, y el destino de la nación dependía de esa gente.
¿Por qué ocurría eso, y por qué aún sigue ocurriendo? En el mundo presente, muy probablemente decidíais las cosas de una forma determinada, ¿pero ocurrían esas cosas como predecíais? ¿Hay más cosas en vuestra vida que no resultaron ciertas o más que resultaron ciertas? El primer día del año planeasteis hacer esto y aquello, pero hacia el final del año, veis que habéis conseguido esas cosas o no? ¿Cuánta gente hay que pueda realmente decir al final del año que han realizado todo lo que planearon? Siempre que observáis vuestro pasado decís ¡Oh, me arrepiento de aquello. Debería hacerlo de nuevo completamente!"
Con vuestro bicentenario a la vista, ¿a quién escogeríais, si pudierais, para ser el líder de esta nación? Si fuerais senadores o congresistas, ¿estáis seguros de que podríais dirigir al pueblo de los Estados Unidos? Hay mucha gente famosa en esta nación, pensando y diciendo cada uno a la gente que aman a este país, y aman a su estado. Pero además de los que realmente aman y piensan en el país y los estados y meditan cómo dirigir a la gente, además de esa gente podemos realmente elegir buenos líderes del mundo futuro. ¿Y si la mayoría rechaza a esa clase de personas? Somos graduados universitarios, somos esto y lo otro. ¿Cómo. podemos ser dirigidos por esa gente sin educación, que siempre están pensando en el mundo espiritual? ¿Os opondríais a eso? En general, la forma de pensar de la gente es así.
La razón de que os diga esto es que la gente en general no está satisfecha con lo que 'nosotros' ya poseemos. Aunque seáis gente corriente, queréis probar los problemas de la vida y determinar de dónde venís y a dónde vais y así podréis tener una vida segura. ¿No pensáis así? (¡Sí!) Si marcháis ciegos sin saber qué puede ocurriros y qué ocurre a vuestro alrededor, entonces sois desdichados. Podéis cerrar los ojos, no escuchar a la gente, no oler nada, porque esos sentidos no funcionen adecuadamente. No podéis determinar qué es bueno y qué es malo. ¿Podéis así hacer buenas cosas? ¿De qué os sirve hacer buenas cosas? Cuando dejáis de pensar en todas esas cosas os sentís muy limitados y sentís que el mundo entero es un campo de concentración. No dormís bien, ni coméis bien. En ese caso, ¿no querríais ir al aire libre?
He estado enumerando las condiciones que pueden hacernos desdichados. ¿Sois realmente felices aquí? (¡Sí!) No veo que estéis seguros de eso. Sois infelices, gente desdichada, ¿no es así? (¡No!) Ni siquiera sabéis lo que le va a ocurrir a la Iglesia de Unificación. ¿Conocéis realmente qué clase de persona es el Reverendo Moon? ¿Quién lo sabe? Podría incluso engañaros o embaucaros. ¿Por qué me queréis? Si hubierais perdido algo por mi culpa, no me querríais, estoy seguro. Por lo menos debéis haber obtenido 'algo' de mí. Entonces, ¿qué será eso? Ganasteis algo con lo que habéis aprendido de mi algo sobre la vida. No podéis negar que lo que el mundo necesita no es al filósofo, sino al profeta. ¿Fue el comunismo el producto de un filósofo o de un profeta? (¡Filósofo!) Hay muchos filósofos y pensadores en éste mundo, con muchos seguidores, pero ¿podéis creerles y confiar en esa gente? ¿Podemos dejar realmente nuestra vida en sus manos? (¡No!) ¿Tendremos confianza en que acabe el mundo guiado por filósofos, y que el nuevo mundo llegue bajo la guía de profetas? (¡Sí!) Podéis encontrar muchos grandes pensadores y filósofos en los campus universitarios, pero no líderes religiosos. Los profetas no se pueden encontrar en los campus universitarios. Debéis buscar los profetas en los círculos religiosos. ¿Pero qué le gusta más a la gente, la religión o la universidad? (¡La universidad!) Ese es un signo de destrucción o peligro. ¿Encontráis alguna esperanza en los campus universitarios o en los círculos religiosos? (Ninguna.) Si queda alguna esperanza aunque sea remota, es en el mundo religioso. Por ello no volveréis a la Universidad de Harvard, Yale o alguna de las grandes universidades, sino volveréis al mundo religioso. Cuando vemos a los líderes religiosos, particularmente profetas, ¿son normalmente gente bien educada o gente sin educación? ¿Si fuerais la gente en general, confiaríais más en aquellos que son educados o en aquellos que son ignorantes? (¡En los educados!) Si eso es cierto para la mayoría de la gente, podemos decir que es muy probable que el mundo esté dirigido en la dirección falsa.
Los que han guiado la historia humana en el pasado han sido sin excepción los profetas y santos. Hay un signo chino que tiene más significado que vuestra palabra "santo". Representa "el rey de vuestro oído y boca". Sois el rey de vuestros oídos, de vuestros ojos y boca. Vuestra boca debe ser como un rey. El rey dice cosas importantes y ni una más. Es muy autoritario. El segundo signo significa una persona, y la primera parte indica tierra o suelo. Eso significa arrastrar a la gente. La última significa el sol. El sol significa el cielo, o los días. Por lo tanto, esa persona puede dirigir o guiar a la tierra y los cielos por muchos días. Si no eres capaz de hacer eso, no puedes ser llamado santo. Hay un significado muy profundo ahí. Lo mismo se aplica a la religión. Hasta que no conozcáis algo sobre una religión, realmente no podéis valorar nada.
¿Entonces qué os parece mejor la filosofía o la religión? (¡La religión!) ¿Por qué? (Porque habla de Dios.) Cuando decís "mejor", significa que una es mejor que la otra. Aprendéis más de una de las dos, y en religión aprendéis sobre Dios. No aprendéis sobre el hombre, sino sobre Dios quien es la fuente del hombre. En religión, es mejor para los demás que no estudiéis o aprendáis sobre los hombres. Ante todo, deberíais estar aprendiendo a conocer a Dios. Es diferente un punto de vista del otro. Por ejemplo, decid que habéis creado una religión. ¿Tendría Dios algo que ver con esa religión? (¡no!) Podríais adorar, cantar himnos, hacer cualquier cosa, pero ¿vendría Dios a vosotros? (!No!) ¿Podéis aún decir que la religión está hecha por el hombre? (¡No!) ¿Entonces quién hizo la religión? (¡DIOS!) Si la religión es obra de Dios, debéis seguir siempre la instrucción proveniente de Dios en esa religión.
Las religiones hechas por hombres no son auténticas religiones diría yo. Son religiones institucionales, organizadas quizás, pero no auténticas religiones. Hay muchos puntos que engañan. Cuando decís "Dios", ¿a qué clase de Dios os referís? Hay muchos dioses en las mentes de la gente ‑ dioses de culto, dioses mixtos, dioses malos, dioses buenos. Hay muchos dioses. ¿Qué clase de dios querríais tener en vuestra religión? (¡Bueno!) pero todos en su religión llamarían a su dios un dios bueno. En el mundo democrático, la gente dice que la democracia es el mejor sistema. En el mundo comunista, la gente está segura que su ideología es la mejor. ¿Puede haber dos que sean las mejores? (¡No!) Entonces, de las dos, una es falsa. ¿Hay más gente en el mundo que piense que el comunismo es lo mejor, o que lo es la democracia? (¡La democracia!) ¿Y la gente joven? ¿Ponen más esperanza en el mundo comunista o en el mundo democrático? ¿Más en la Rusia soviética o en América? ¿?hay más gente joven en el mundo que ponga sus esperanzas en la Rusia comunista o en  la América democrática? ¿Están las naciones comunistas en el papel director de la ONU, o son las naciones democráticas? (Las comunistas.) América está siendo relegada al último lugar. Estáis confundidos. ¿Cuál es justa, cuál es falsa? Más y más la gente joven está diciendo, "Yo pensaba hasta ahora que la democracia era el mejor sistema, pero puede ocurrir lo contrario." Estáis cerca de entrar en esa etapa. No discernís lo que es bueno y lo que es malo, qué es verdad y qué es falso. ¿Lo sabéis realmente?
¿Entonces quién puede definir lo que es bueno y lo que es malo? ¿Puede el comunismo definirlo? ¿Podemos dejar que la democracia lo defina? (¡No!) ¿Quién entonces? (¡Dios!) ¡Pero la gente es ignorante acerca de Dios! ¿Cómo pueden volver a Dios a por la definición? Sí, estáis en lo cierto. Dios lo definirá, ¿pero a través de quién lo hará? El lo definirá a través de Su profeta o a través de la gente de los círculos religiosos. El signo en el lenguaje coreano que representa a Dios significa "uno". Hanna es uno, Nim es Maestro: Un Señor, un  Maestro. No habrá ningún otro Señor sino Dios. Decís que Dios se puede definir de esa forma, ¿pero podéis ver a Dios? En los últimos días, deberá venir un gran Profeta capaz de discernir qué es bueno y qué es malo, guiando a la gente en la dirección correcta. El puede analizar y juzgar al mundo, y dirigir a la gente hacia la meta que Dios nos propuso. Sin esos profetas surgiendo en los últimos días, el mundo sería conducido a una situación peligrosa.
¿Esperáis que venga tal persona en los últimos días? No solo vosotros sino, inconscientemente, toda la gente del mundo, incluyendo al mundo espiritual y a Dios, todos quieren que aparezca tal persona. ¿Solo anticiparíais su llegada o estáis seguros de que está al venir? (¡Seguros!) Gracias a Dios, hemos tenido la predicción de que venía el Mesías. ¿Es el Mesías un filósofo o un profeta? ( ¡Profeta!) Es el rey de los profetas. En el pasado habéis visto muchos líderes, y muchas religiones y buscáis a tal profeta en los círculos religiosos. Si hay una religión donde realmente os enseñen cómo encontrar al Mesías, y cuándo y dónde viene el Mesías, volveríais a ella, ¿no es así? (¡Sí!).
En la Biblia, a veces tenéis la impresión de que os cuenta que el Mesías, al venir será juez sobre toda la creación y dominará al mundo entero. Pero por otro lado, leéis que el Mesías buscará a una novia. Ambas cosas son ciertas, pero cuál ocurrirá primero ‑¿estará aquí y entonces buscará impaciente una novia, o antes juzgará al mundo? Estará impaciente de buscar a su novia. ¿Cuál es la definición de "juicio"? ¿Cómo juzgará a la gente? Es verdad que juzgará con verdad, pero ¿qué es la verdad? La verdad es una combinación de palabras. ¿Qué significa la palabra "verdad"? La auténtica verdad es el hombre mismo. ¿Qué clase de hombre? (¡Perfecto!) El Mesías es la verdad misma, o la verdad encarnada, ¿No dijo Jesús "Yo soy el camino, la verdad y la luz"? El fue la verdad misma. El hombre ver­dadero es la verdad. Si Jesús vino como el novio, por qué tenía que buscar una novia? La definición de un hombre verdadero no es el hom­bre solo. El hombre verdadero y la mujer verdadera juntos hacen un hombre verdadero, y solo entonces con ese modelo de verdad, pueden
juzgar a la gente ‑ hombre y mujer.
Cuando encontréis a vuestro Mesías, ¿diríais que os parecéis a él en un 80 por ciento, o más o menos? (¡Menos!) ¿En qué tanto por ciento decís que os parecéis a él? Aquellos que puedan decir yo me parezco a él en un 100 por cien, levantad la mano. ¿Si fuerais el Presidente Ford, podríais decir, "Yo me parezco al Mesías en un 100 por cien? (¡No!) ¿En quién podéis confiar? (¡En el Mesías!) ¿Y el Papa de Roma? ¿Se parece él al Mesías en un 100 por cien? (¡No!) ¿Y Billy Graham? (¡No!) De hecho, nadie sabe qué porcentaje de parecido tiene con Dios. ¿Lo sabe el mismo Papa? ¿Lo sabe Billy Graham? (¡No!) Solo el Mesías, cuando venga, puede juzgaros. Dios conoce. El Mesías conoce, y nadie más. Esto es por lo que toda la gente está sentenciada al juicio. El juicio no es otra cosa sino ser comparados con el modelo o medida de la ley divina. Eso es el juicio. Por eso cada uno está expuesto al juicio.
¿Entonces qué es más importante que la gente aprenda: ciencia, filosofía, acerca del mundo, acerca de las relaciones humanas: o que estudie a los seres humanos y a Dios? (¡A DIOS!) Debíais saber que lo más importante para nosotros es aprender sobre Dios, y luego sobre el hombre. Para tratar con el hombre, antes debéis aprender sobre el Mesías. Podemos definir a una religión como la verdadera cuando la gente os enseñe sobre Dios, sobre el hombre y sobre la relación entre Dios y el hombre. ¿Os enseñan esto vuestras universidades? (¡No!) ¿Donde os enseñan sobre Dios? (En Barrytown.) Buscáis una religión verdadera. ¿Cuál es la religión completamente verdadera? Esa es la cuestión. ¿Qué dijisteis que significaba la verdad? (El Mesías.) La verdadera religión es el grupo donde os enseñan a ser verdaderos hombres, y donde la gente está siendo cambiada para ser buena o verdadera.
Yo soy una figura controvertida en esta sociedad. Por ejemplo, NBC ha criticado a nuestro grupo, mientras otros se han interesado y preocupado por nosotros. Soy tan famoso que si un coreano preguntara a otro coreano que viva en esta vecindad si me conoce, se referiría a mí como el famoso Sun Moon que vive en Tarrytown. Sin darme cuenta de ello, me volví cada vez más famoso aquí. ¿Soy famoso en el buen sentido o en el malo? (¡Malo!) ¿Pero pensáis vosotros que yo soy maloComparado al gran número de gente que me llamó malo, sois un pequeño número! ¿Cómo puedo ser definido como "bueno"? Aquella gente, aunque sean un gran número están criticándome sin haberme visto, sin habernos encontrado ni una sola vez. Pero nosotros nos hemos encontrado con ellos, hemos estado viviendo con ellos, les hemos conocido durante muchos meses, muchos años. Por eso vosotros confiáis en definirme como bueno, aunque las voces que me llaman infame y cosas por el estilo sean fuertes, no os conmovéis en modo alguno, no vaciléis ni os inmutéis. Yo también confío y simplemente ignoro lo que dicen. Soy indiferente a su clamor. ¿Os gustaría que la gente se opusiera a nuestro movimiento o no? (¡No!) Yo tengo una idea diferente. Cuando se nos oponen llegamos a ser más y más famosos en el tiempo más inmediato posible. Los malos rumores se extienden antes. Los malos rumores son buenos en dos sentidos. Extendiéndolos nos ayudarán a ser famosos antes. Y afrontando la oposición, nuestros miembros serán más y más fuertes. Vosotros estáis más determinados a luchar contra ese poder malo y llegáis a uniros más conmigo. Por eso mi actitud es dar la bienvenida a la oposición, venga por donde venga. Pero, quiero que seáis tan fuertes que incluso una pequeña muchacha pudiera persuadir a la gente mediante sus acciones y palabra: de que somos buena gente. Cuanto más fuerte es el enemigo, debéis estar armados con armas más fuertes y temibles. Dejad que se os opongan, y les combatiréis y venceréis. Somos gigantes, sin ser nunca vencidos por otros. Siendo así, ¿queréis que os venga oposición o no? (¡Si!)
Si sois forasteros en un pueblo lejano, es natural que os ladren los perros. Soy forastero aquí en América. Este forastero es muy extraño a los ojos de los senadores  y congresistas. Tienen quebraderos de cabeza por los jóvenes de esta nación, e incluso no pueden hacer que sus propios hijos e hijas les obedezcan. Pero viene este hombre del Oriente y dirige un grupo de la flor y nata de la juventud, quienes le siguen dondequiera que vaya, y ponen en práctica aquello que les hubiera ordenado. Eso es la cosa más extraña que ocurre en esta nación. De nuevo debo decir que es natural que me la­dren los perros. Yo quiero que todos los aldeanos salgan a mi encuentro, y esa es la única manera. Si el perro no ladra, ni un alma sal­drá a mi encuentro. No me importa que se me opongan. El artículo que algunos periódicos hicieron sobre Wendy Helander fue bueno, sobre todo a nuestro favor. Si yo estuviera en su posición, querría con­tarlo en todos los periódicos, como ocurrió en la ocasión en que apoyamos al presidente Nixon. Pero, si hiciera eso, la oposición se calmaría, y eso sería el final de la diversión. Si estáis en el ring de lucha libre y hay voces desde los graderíos animándoos u oponiéndose, si hay más gente oponiéndose, entonces estaréis más determina­dos a vencer. Esa clase de combate es también más interesante para presenciar. Me gusta algo sensacional, por eso doy la bienvenida a la oposición. Si confiáis y tenéis la capacidad de hacer algo, entonces no temáis la oposición y la dureza.
¿Os gusta estar en la Iglesia de Unificación? (¡SI!) ¿Por qué? (Es emocionante) ¿Qué encontráis emocionante y sensacional aquí? Siempre os empujo duramente, por eso os superáis en el trabajo. ¿Aún así me queréis? A la gente le gustaría que os dejara relajaros y comer ricos alimentos, vistiendo buenos trajes, que durmierais bien y estuvierais bien hospedados. Pero lo que estoy haciendo es contrario a todas esas cosas. No obstante, ¿os gusta estar aquí? (¡Sí!) Estáis chiflados. (¡Sí!) ¡Estoy del lado de vuestros padres cuando dicen que sois gente chiflada! Hablando francamente, estáis chiflados por algo, no es verdad? (¡Si!) ¿Qué es lo bueno de este movimiento por lo que estáis chiflados? (¡Dios!) Lo que lo hace bueno es que nosotros conocemos la diferencia. La forma de pensar de vuestros padres es egoísta, egocéntrica. En cambio nosotros pensamos en Dios y la humanidad. Si vamos a ser abandonados al final de los últimos días, con el fin de que podamos avanzar en el juicio, ante Dios y el Mesías, debéis saber cómo andar por el camino, se os debe enseñar el camino. Tenemos esas cosas en nuestro movimiento. Eso es lo que nos hace diferentes. En el juicio, estáis en la sala de audiencia. Dios es el juez, vuestro abogado es el Mesías, y Satán es el fiscal. Estáis de pié ante los tres. El fiscal, Satán, os acusará de los delitos que os alegan. Pero tenéis a dos a vuestro lado: el abogado v Dios, por eso sois más fuertes. Estáis seguros de ganar el caso con Dios y el Mesías allí, como vuestros padres. Aunque puede que tengáis que pasar por dificultades y penalidades, no os preocupéis. Cuanta más oposición haya, más celo y entusiasmo os vendrá. De lo que tenéis miedo en este movimiento, es de que no estéis realizando todo el trabajo que hay que hacer. ¿Verdad? (Sí!) Nadie querrá que vayáis a hacer colectas, que vayáis a dar testimonio, y tenéis miedo de eso. ¿Es cierto? (¡Sí!) ¿Por qué os comportáis así?
Somos gente diferente. Somos nosotros mismos quienes construiremos nuestros caracteres. Nosotros mismos vamos a construir nuestras familias, nuestras escuelas, la sociedad en que vivimos, nuestro mundo. Tengo mucho dinero, y podría vivir para disfrutar de mi propia vida... ¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué os tengo ganando dinero? ¿Cuál es la mayor universidad de América? ¿Harvard? Nosotros vamos a establecer una universidad más grande que Harvard. El Empire State Building no se está utilizando en el nombre de Dios. Si vamos a establecer una universidad, vamos a hacer la más grande, y para establecerla, no lo haremos en el tiempo de 10 años, sino en tres años o menos porque somos los hijos e hijas de Dios. Lo haremos por la dignidad de los seguidores del Mesías, en el nombre de Dios, en el nombre del Mesías que va a venir, haremos que sea posible construirlo en un tiempo menor a tres años, incluso en un año o en menos. Si decís "en el futuro más inmediato posible", puedo decir que os parecéis a mí. Por eso os amo. Soy un enigma para el pueblo de América.
Ellos saben que soy un hombre de Oriente que llegué con las manos vacías, pero un poco más tarde aparece el rumor de que he comprado Belvedere, y luego East Garden, Barrytown, el Club de la Universidad de Columbia, y ahora hemos comprado un edificio siete veces mayor que el Club de la Universidad de Columbia! La gente esta asombrada. Hemos establecido el seminario de teología, y estamos casi en camino de establecer una universidad. Hasta ahora hemos estado alquilando un avión jumbo, pero vamos a comprar uno. Todo lo que hago, lo hago en el nombre de Dios, no en el nombre del Reverendo Moon. ¿Es que holgazaneo, sentado con los brazos cruzados solo conduciéndoos duramente para ganar el dinero para todo eso? (¡No!) Yo no estoy menos activo mientras vosotros estáis en la calle. ¿No es verdad? (¡Sí!)
En el nombre de Dios, he estado en mi pasado en muchas dificultades y penalidades. Aún lo sigo estando, y lo seguiré estando hasta que todo se cumpla y termine. Si estuvierais vosotros en la posición de Dirigente de la Iglesia de Unificación, ¿durante cuánto tiempo podríais soportar todos esos problemas y quebraderos de ca­beza sufriendo a vuestro alrededor? No podríais ni siquiera dos o tres días. Frente a todas esas dificultades, no llego a estar frustrado, sino me siento más desafiado a cada momento. ¿Querríais un hombre como yo como vuestro marido? (¡Sí!) Estoy tan seguro como para pensar que si yo fuera una chica, también me gustaría tener esa clase de hombre. Estoy seguro y orgulloso de mí mismo. Puedo hacer casi de todo: pruebas atléticas, caza, pesca ‑ cualquier cosa.
Incluso en cuestión de robos, yo quería hacer un ladrón número uno, pero no quise hacerlo. Una vez que me gusta hacer algo y pongo las manos en ello, nunca lo dejaré hasta que tenga éxito. Por eso estoy titulado y calificado para dirigiros. Me entrené para ser así. Cuando llegué aquí, estaba preparado para ello. Me propuse agitar toda la sociedad de América con mis manos desnudas. Quería sentir como si el mundo entero se estremeciera a mi paso. El eje de la tierra se estremecerá. Eso es lo que siento, siempre. Mi vida en el campo de concentración, mi vida inédita, insoportables dificultades y pena­lidades ‑ todas esas cosas me han estado entrenando para ser el más fuerte. Con un buen propósito ante mí, todas esas miserias   pudieron ser usadas como instrumentos para entrenarme. Ahora, equipado con esas cosas, tengo el arma más afilada para luchar contra el poder del mal. Quiero que os parezcáis a mí. Antes de que lleguéis a ser así, debo empujaros a través de penalidades y dificultades. Si no
queréis asemejaros a mí, podéis marcharos enseguida.
Lo mejor y más importante que tenemos que aprender es primero acerca de Dios y el Mesías, antes de estudiaros a vosotros mismos. Si realmente conocéis al Mesías y a Dios, solo tendréis que seguirles para encontraros a vosotros mismos. Si os sujetáis al Mesías solo tenéis que seguirle dondequiera que vaya. Si él va a una familia, iréis allí y seréis bienvenidos con él. Si el va a una nación, voso­tros le seguiréis y seréis bienvenidos allí. Si su destino es el
fin del mundo, le seguiréis, y seréis bienvenidos allí. Incluso cuando estéis en el mundo espiritual, después de la vida física, seréis bienvenidos allí si estáis con el Mesías ‑ desde ahora por la eternidad. El Mesías sabe todo lo que hace Dios. El Mesías sabe sobre
vosotros, sobre sí mismo, sobre la familia, sociedad, nación y todo el cosmos. Por eso, si le seguís, y si hacéis cosas bajo su instruc­ción, llegaréis a conoceros, a conocer la familia, a conocer vuestra nación, al mundo y a todo el cosmos. Si le seguís, significa que estáis en el mismo bote, y aprenderéis a conocer qué clase de hombre es, seguiréis su ejemplo y sentiréis gran diversión y gran valor siguiéndole. Incluso aunque estéis en el mar embravecido, con vues­tro bote cabeceando de atrás a delante, aún tendréis diversión y os sentiréis a salvo ya que estaréis yendo a la otra costa. En el mar turbulento, por supuesto que el bote se meneará, y algunas veces no comprenderéis lo que el Mesías esté haciendo. Pero estaréis se­guros de que al final alcanzará la victoria, por eso la salvación para vosotros está en seguirle. Si estáis en esa posición, qué fe­lices debéis estar. Si realmente tenéis al Mesías y le conocéis, todo el resto de vuestros problemas estarán resueltos. Si realmente encontráis al Mesías y le seguís, entonces llegaréis a comprender sus tácticas. Llegaréis a tener una aguda visión y un agudo sentido de lo que es bueno y lo que es malo, de lo que va a suceder – todas esas cosas. Os convertís en un Mesías en miniatura. ¿Necesitáis a ese Mesías? (¡Si!) ¿Necesitáis a América o al Mesías? ¿Tomaríais América para el Mesías, o al Mesías para América? (¡Al Mesías para
América!) ¿Querríais tener al Mesías por encima de todo el mundo? (¡Sí!)
No importa que os olvidéis de todo, pero debéis recordar esto. Si conocéis a Dios y conocéis al Mesías, eso ya es todo lo que tenéis que hacer. Yo me he esforzado duramente, he estudiado. Pero, el propósito para hacer todas esas cosas fue para encontrar a Dios y al Mesías. El Reverendo Moon no es un mero filósofo. ¿Qué soy? Estoy en la categoría de profeta. Lo que digo llegará a ser realidad. Por eso la gente atiende a lo que estoy haciendo, si digo cosas de envergadura se asustan. ¿Sois como la gente mundana que esperáis para ver algo? (¡No!) ¿Me seguís desde atrás, o querríais estar en la vanguardia? (¡Al frente!) Si vais delante mía, por qué no me sujetáis y me arrastráis con vosotros? No me dejéis ir, ese es el secreto. Habéis aprendido muchísimo en la Iglesia de Unificación, no es cierto:
Cómo es Dios, cómo es el Mesías, a donde va a parar el mundo. ¿Pensáis que la Iglesia de Unificación perecerá al final, o escapará de esta guerra de asedio? (¡Escapará!) ¿Cómo y  por qué? Es porque yo estoy aquí, o porque vosotros estáis aquí? (¡Tú!) Yo estoy viejo físicamente, pero me encuentro todavía joven y energética. Ninguna otra persona aparte de mí en toda la historia de la humanidad puede hacer mi tarea.
El matrimonio mixto entre gente blanca, gente amarilla, y gente negra, es el único medio posible de llevar realmente al mundo a la unidad. Conocéis la bendición de ser miembros de la Iglesia de Unificación, ¿no es cierto? (¡Sí!) La cuestión ahora es cómo avanzar hacia delante. Debéis daros cuenta de la bendición que supone haber sido instruidos que supone acerca de cómo han de ser los individuos, las familias, sociedades, naciones, y cómo ha de ser el mundo, cómo es Dios y cómo es el Mesías. Yo no soy un filósofo, pero soy el mayor de todos los pensadores, con el conocimiento necesario para dirigir a la gente. Y soy un hombre muy lógico. Cuando creo en algo, no creo ciegamente. Quiero que sepáis que en la Iglesia de Unificación no os estamos enseñando a pensar en términos ambiguos.
Lo que enseñamos aquí es universitario en el sentido de ciencia social. En la investigación científica, sientan una hipótesis primero y luego hacen la investigación. El resultado probará la hipótesis.
Lo que enseñamos en la Iglesia de Unificación es más que eso. Yo he comprendido la clara visión de qué es Dios y qué es la humanidad, y os dejo que vosotros conozcáis poco a poco, mediante el experimento por el que yo ya he pasado. Tengo la visión clara de dónde va a parar el mundo entero. Si converso con filósofos, pruebo profundamente lo que ellos nunca podrían contestar. Puedo hablar sobre el mundo espiritual, que esa gente no conoce. Estoy especializado en ese campo.
Podéis ser comparados a la gente que ha pavimentado la carretera, recta y llana, después de haber conocido a Dios, conocido al Mesías, conocido la vida y la meta, estáis preparados con un lujoso y confortable Lincoln limousine, y vais a empezar vuestro camino.

Algunos de vosotros ya han aprendido cómo manejar el coche. Algunos están más ágiles y confortables en el  asiento, siendo capaces de manejar el coche libremente. Con todo nuestro conocimiento, somos la gente más feliz del mundo.

Dios y Yo

Dios y yo
27 de septiembre de  1975
Barrytown, Nueva York
Reverendo Sun Myung Moon

Esta tarde mi tema “Dios y yo”. Sin excepción, toda la gente del mundo tiene alguna clase de esperanza y deseo. Desean la felicidad, pero siempre de un modo egoísta. ¿Qué es la felicidad? Debemos pensar en ello. Los hombres y mujeres solteros pensáis que podéis encontrarla al tener una buena compañera. ¿Puede la compañera de vuestros sueños proporcionaros realmente la felicidad desde el comienzo de vuestra vida matrimonial hasta el final? Al principio, podéis ser felices, pero a medida que  avancéis puede que haya una enfermedad, desencanto del uno al otro, y cosas así. Vuestra pareja puede morir antes que vosotros, dejándoos viudos. ¿Podéis ser realmente felices en esa situación? Incluso podríais ser más infelices que antes de casaros con él o ella. Habéis visto muchos ejemplos por el estilo en la gente que os rodea, ¿no es cierto? Desde este punto de vista, podéis decir tranquilamente que no podéis esperar la verdadera felicidad de aquellos seres amados a los que una vez amasteis tan profundamente que pensabais que iba a perdurar vuestra felicidad.
Podéis pensar que cuando tengáis vuestros propios hijos, seréis muy felices, pero aquí se aplica lo mismo ‑ ¿quién sabe? ‑ vuestros hijos pueden ser infelices, estar impedidos, o enfermos. Como hijos, a veces estáis contentos y decís que sois los más felices del mundo entero porque hay armonía y felicidad en vuestra familia, pero, ¿quién sabe?, poco después podrían separarse vuestros padres. Hace solo unos días, cuatro de nuestros miembros murieron en un accidente de tráfico. En el otro coche iban un padre y una madre con su hijo, y ambos padres murieron en el choque. No sabemos qué clase de viaje hacían. Puede  que    fueran en camino a visitar a alguno de sus amigos cuando ocurrió aquello. Podían haber pensado que eran la gente más feliz del mundo pero no sabían lo que les esperaba aquel mismo día. Visto desde ese punto de vista, no podemos asegurar que lo que ahora disfrutamos es verdadera felicidad.
A veces podéis pensar que sois felices al tener grandes  conocimientos. Podéis tener éxito en vuestra  carrera  mundana con todo ese conocimiento, ¿pero es eso realmente cierto? Suponed que el resultado de la investigación de un estudiante pudiera decidir la vida o la muerte de su nación o del mundo. El podría ser una persona muy sensata pero ¿y si no tuviera ningún dinero ni equipo para tal investigación? ¿Cómo se sentiría? Dormido o despierto, ya estuviera comiendo o jugando, todo su corazón estaría concentrado en ese único punto. ¿Sería feliz o infeliz?
Pensemos acerca del poder o la posición. Y si fuerais el presidente o un senador o congresista? Una acción o un pensamiento vuestro podría conducir a la nación a la destrucción y peligro o a la felicidad y el éxito. Podríais pensar que al tener poder podéis hacer cualquier cosa, pero si vuestro uso de ese poder llevara a la nación a la miseria, ¿podría ser considerado bueno vuestro amor al poder?
¿Puede haceros feliz el dinero? (¡No!) Suponed que tenéis 10.000$ en vuestros bolsillos, vuestra mente estaría preocupada por eso, y no podríais relajaros. En los primeros días de nuestro movimiento, a veces uno de los miembros tenía que guardar una gran suma de dinero. Yo decía que esa persona no podía dormir durante toda la noche. Tenía que permanecer de pie toda la noche, con el fin de que no se perdiera el dinero. Así pues, no es el dinero lo que os hace felices. Cuando comparáis a alguien de una familia pobre, y alguien de una familia rica, normalmente se piensa que debe ser feliz el de la familia rica. Pero no es necesariamente así.
Entonces dónde se encuentra la felicidad, si el conocimiento, el dinero, el poder, cualquier cosa puede irse a pique. La gente quiere felicidad eterna, felicidad absoluta, porque toda felicidad relativa puede marcharse con el tiempo y las circunstancias. La felicidad eterna solo puede venir de una fuente eterna. Tenemos una corta vida. Si se os pidiera que dijerais las tres cosas más importantes diríais acertadamente: Primero, el hombre. Después viene el mundo creado a vuestro alrededor, luego Dios. Durante toda nuestra vida, hemos estado buscando la verdadera felicidad en los hombres. Pero sólo nuestros compañeros no pueden hacernos felices. Debemos tener cosas con nosotros. Por eso, para la mayoría de la gente ha sido importante la riqueza material. Como bien sabéis, la historia humana ha sido una sucesión de guerras por tierras o riquezas. El problema está en qué es realmente lo vuestro. ¿Os traería la felicidad lo que tenéis ahora mismo? ¿Sería una felicidad verdadera que os durara eternamente? Lo que disfrutáis ahora, puede desaparecer mañana. Así mismo, queréis tener amigos y gente a vuestro alrededor que trabe amistad con vosotros. Buscamos gente feliz.
La Edad Media estaba centrada en el personaje del Papa, pero la religión se corrompió. Cuando entramos en el periodo del Renacimiento, la gente  llegó a pensar solamente sobre el hombre. El Humanismo negó y rechazó a Dios para encontrar el valor del hombre. El Humanismo, más tarde fue negado por una ideología materialista, dando nacimiento al Comunismo. En el periodo presente, la gente pone más énfasis en las cosas materiales, son negados ambos Dios y los hombres. En el mundo comunista, con  el objeto de que seáis un auténtico comunista, y todos los demás comunistas confíen en vosotros, debéis ser capaces de matar a vuestro padre si está en contra del comunismo, o indiferente ante la ideología comunista. Está negado el lazo entre padres e hijos. La fuente de la felicidad en su sociedad radica en el Partido Comunista. Aparte del Partido, no tenéis libertad ni  felicidad. Las aspiraciones del Partido Comunista son conseguir la hegemonía sobre todo el mundo. ¿Pero, qué ocurrirá después de que tomen el mundo entero? ¿Pueden garantizar   la felicidad humana? Centrados en la ideología del Partido, habrán unido al mundo entero en un mundo de terror. Nunca podría haber felicidad en tal mundo. En el mundo comunista, solo dan importancia a los aspectos materiales de la Vida. La materia no se puede conectar con los hombres y Dios en esa ideología. Por consiguiente, bajo el comunismo no puede haber algo así como un valor absoluto. Según nuestro modelo, nosotros no podemos encontrar ninguna felicidad en su método.
Entonces, ¿Cómo podemos encontrar la felicidad? En América, disfrutan de abundancia de riqueza material. Tienen poder humano. ¿Pueden esas dos cosas resolver los problemas humanos? Hemos tratado de conseguir de muchas formas la felicidad mediante esas dos cosas, y hemos fracasado. Debemos volver a valorar lo que pueden traernos los hombres felices y las cosas materiales. Dios es el origen de la materia y de los hombres, debemos ser capaces de volver a valorar incluso a Dios, porque no le conocemos muy bien. ¿Es esa la tarea de una nación en particular o pensáis que es la tarea de todos, incluidos vosotros? ¿Es la tarea de todo el mundo? (¡Sí!) Tanto las naciones como el mundo consisten de individuos como vosotros. Antes de que vuestra nación sea feliz, vosotros queréis ser felices. Antes de que el mundo sea feliz, vosotros mismos queréis ser felices. Vosotros sois la fuente de la felicidad. Cuando se reúnan individuos felices para formar una nación, esa nación será una nación feliz.  Y el mundo será un mundo feliz.
Por supuesto que Dios querría tener a todo el mundo feliz, pero ¿puede El hacer feliz al mundo entero de una sola vez? (No) Debe estar planeando cómo hacer la nación más feliz del mundo. ¿Cuál es la forma de pensar de la gente? Cada uno de vosotros pensáis solamente en ser felices vosotros mismos. Suponed a un muchacho alemán, quiere hacer feliz a toda la nación de Alemania, una vez que él sea feliz. Lo mismo ocurre con un  italiano, y con un americano. ¿Pero cuando estéis centrados en vuestro propio ser y en vuestra propia nación, podréis conseguir la verdadera felicidad para el mundo? (¡No!) Cuanto más amplio sea el alcance, mayor será el grado de felicidad. Si pensáis en la felicidad centrados en un mundo democrático, o ‑ si eres comunista centrado en el mundo comunista, es un alcance un poco más amplio de pensar en la felicidad, ya que trasciende las fronteras nacionales.
En el mundo democrático, la gente ha llegado a una situación sin salida y el mundo comunista, también, está paralizado. La gente busca cualquier forma de conseguir la felicidad para el mundo entero. Al pensar de esa forma, están pensando igual que Dios.
¿Cuál es la meta de la felicidad humana? ¿Cuál es el modelo? La meta debe ser que el mundo entero disfrute de felicidad, trascendiendo las fronteras de ideologías tales como la democracia o el comunismo. ¿Quién puede hacer feliz al mundo entero? Si hubiera tal persona en el mundo, Dios querría encontrarle. Durante toda la historia, los hombres se han esforzado mucho para encontrar la verdadera felicidad, pero han fracasado porque la verdadera felicidad viene solamente al encontrar tal felicidad como Dios quiere que la encontremos.
El universo entero es propiedad común del hombre, no una propiedad individual. Todas las cosas que están en vuestra posesión las poseéis en común con los demás. Incluso al relacionaros con otra gente, no podéis tratar a alguien como si fuera vuestro. Nada puede ser controlado o poseído por vosotros, y no podéis ejercer vuestra libre voluntad sobre las cosas. Cuando decís que sois americanos, significa que pertenecéis a América. Estáis poseídos por algo mayor que vosotros mismos. Si alguien maltrata a un americano, significa que maltrata a los americanos en general, o a la nación americana.
Si alguien ama a un americano, significa que él o ella ama a América misma, porque el individuo no es tan solo un individuo, sino la propiedad común de América como un todo. Desde este punto de vista, vuestra hermana no es de vuestra propiedad, vuestros padres no son de vuestra propiedad. Por eso, no podéis usar o controlar libremente las cosas o a esa gente. Quiero que tengáis la idea de que sois de propiedad común y por eso no podéis hacer libremente cosas sin pen­sar en los demás. Si queréis utilizar a alguien o a algo, debéis hacerlo de acuerdo con la ley pública, o la ley común. Bajo la ley común,  no  podéis violar               ningún derecho personal.
También debe haber una definición del amor que pueda ser entendida por todos. En la familia,  entre los hijos y los padres, debe haber una ley de amor, también entre el marido y la esposa. La felicidad no puede surgir cuando os despreciéis y neguéis los intereses de los demás. Solo al tomar en consideración los intereses de las otras personas podéis conseguir la verdadera felicidad que podéis disfrutar con cualquiera.
De este modo llegamos a la conclusión de que la última felicidad radica donde todo está    bajo la propiedad común. Podemos decir, acertadamente, que cuando una cosa está bajo la posesión común de Dios, los hombres y las cosas, entonces llegamos a la última felicidad. De tal forma que la última felicidad, la verdadera felicidad radica donde las cosas y los hombres están bajo la posesión común de Dios, los hombres y las cosas. Y ésa debe ser una relación duradera, no temporal. Con el objeto de que lleguéis a ser felices, tratad de encontrar lo que esté compartido entre los hombres, Dios, y las cosas.
¿Habéis encontrado alguna vez una institución educacional donde enseñen eso? (¡No!) En el mundo estudiantil, unos tratan el aspecto material de las cosas, otras el aspecto humanitario de las cosas, y algunos a Dios. En el mundo político, hay división entre religión y política. Es decir, ninguno de los dos campos nos podrían dar la felicidad. La política sin Dios, la religión sin política… eso no nos puede proporcionar la verdadera felicidad. Solamente con todas esas cosas combinadas y dirigidas hacia la felicidad conjunta, podemos alcanzar la felicidad duradera. Eso es lo que tenemos en la Iglesia de Unificación que resulta diferente.
Dios necesita tanto a los hombres como a las cosas. Los hombres necesitan tanto a Dios como a las cosas. Las cosas necesitan tanto a Dios como a los hombres. Cuando hablemos sobre el valor de alguna cosa, podremos definir esa cosa como muy valiosa porque no es necesitada solamente por los hombres, sino también por Dios. Cuando penséis en una persona, debéis pensar en ella como hombre con sus características materiales e incluyendo su forma de pensar en Dios. Hasta el momento, la gente ha pensado en sí misma de una forma profundamente egoísta, a parte de Dios y de su ambiente social. Pero, aparte de ambas cosas, realmente no sois vosotros mismos. El mundo democrático piensa en las cosas de forma centrada en los hombres. El mundo comunista piensa en los hombres de forma centrada en la economía, o en las cosas. En ninguno de los dos mundos piensan que necesitan a Dios. Cuando miréis íntimamente en vuestro ser, encontraréis que el hombre está hecho de espíritu y carne, mente y cuerpo. Vuestro cuerpo físico pertenece al mundo material, mientras que vuestra mente pertenece al lado espiritual. ¿Comprendéis realmente que hay en vosotros dos poderes: uno perteneciente al lado espiritual, y uno perteneciente al lado carnal o material? Hay dos personas dentro de vosotros. Muy probablemente, el modo de pensar de vuestro hombre interior u hombre espiritual, y el modo de pensar de vuestro hombre físico, son diferentes el uno del otro. ¿Hay unidad y armonía entre vuestra mente y vuestro cuerpo? (No.) Pero, ¿estáis esforzándoos duramente para unir a los dos en una unidad? (¡Sí!) Dios habita en vuestro espíritu, y la materia está en vuestra carne, por eso, sois uno con Dios y la materia juntos.
Debido a la Caída Humana, hay una contradicción entre vuestra conciencia y vuestro lado carnal. Si no hubiera sido por la Caída del hombre, vuestro lado carnal obedecería a vuestro lado espiritual.
Debéis lograr la unidad de los dos a toda costa. Debéis unirlos a los dos centrados en un valor universal. ¿Cuál debe ser entonces el valor universal? Esto significa que cuando os alegréis, lo hagáis con Dios y todas las cosas. Cuando Dios se alegre, os alegraréis junto con El y las cosas materiales. Cuando parezca que las cosas materiales se alegren, lo harán con Dios y vosotros. Cuando Dios, el hombre, y todas las cosas se alegren juntos, ése será el valor último y uni­versal.
La apariencia externa del hombre se puede dividir en dos, siendo cada parte una copia de la otra. Es como si uniéramos las dos partes. Dentro de vosotros, ocurre algo similar a eso: vuestra mente y vuestro cuerpo están unidos formando una unidad. Una cosa es invisible, mientras que la otra es visible. Si estáis más inclinados al lado espiritual de las cosas, estáis propensos a descartar el lado material. Cuando estáis más inclinados al lado material, ocurre lo contrario. Lo mejor para vosotros es no estar inclinados a uno de los dos sino estar equilibrados entre los dos. Cuando armonicéis vuestro espíritu y vuestro cuerpo mientras viváis en la tierra, crearéis el Reino de Dios terrenal, después de pasar al otro mundo, viviréis en el Reino de Dios celestial. Así os habréis restaurado.
En vuestra mente, el poder de Dios está en guerra con el poder satánico inherente en vuestro cuerpo físico. ¿Os dais cuenta de eso? (¡Sí!) De esta forma podéis conocer la maravilla de vuestro ser. Sois el microcosmos de todo el universo, la esencia del mundo espiritual y la esencia del mundo material están combinadas en vosotros. Cuando digáis "Yo", debéis ser capaces de encontrar dentro de vosotros la forma resumida del mundo espiritual, incluyendo a Dios, y la forma resumida de todo el mundo físico. Además, queréis ser el centro de la sociedad humana. Sin ser esa clase de persona, no podréis encontrar la verdadera felicidad. Si alguien realmente representa a Dios, al hombre, y a todas las cosas entonces Dios necesita a esa persona, toda la sociedad humana necesita a esa persona, y las cosas de la creación necesitan a esa persona. Si os ponéis en la posición de Dios, ¿no pensará El que necesita a tal persona? (Sí.)
Cuando miráis algo, vuestros ojos encuentran un foco, y solo cuando los tres están unidos podéis ver algo. También al oír, vuestros dos oídos deben coger la misma frecuencia del sonido, o si no, no podéis oír bien. ¿No es cierto? Al respirar, igual, si una de las ventanas de vuestra nariz esta taponada, ¿podéis respirar u oler bien?
La idea de personalidad que enseñamos en la teología de Unificación es que debéis ser alguien necesitado por Dios, los hombres y las cosas. Solamente con los tres combinados podéis construir vuestra verdadera personalidad. Y solamente cuando encontréis felicidad poseída en común con todas esas cosas podréis llamarla una felicidad verdadera y duradera. Hasta ahora la teología ha enseñado que Dios está muy por encima de nosotros, nosotros somos solo pecadores, sin estar capacitados para tratar con El, y hay un gran abismo entre Dios y el hombre, entre el hombre y todas las cosas, y entre Dios y las cosas. Dios permanecerá todopoderoso y bueno, y los hombres permaneceremos por siempre pecadores. Que el hombre pueda estar en el mismo nivel que Dios es el mayor de todos los descubrimientos.
Solo cuando observemos la felicidad, con los ojos de Dios, con los ojos de los hombres, y desde el punto de vista de todas las cosas, podremos encontrar la felicidad duradera. Con esos tres elementos unidos, podemos construir una personalidad auténtica y valiosa. Hay personas en este mundo que ponen más valor a un diamante que a su propia vida. Por otro lado, hay gente que valoran a Dios mucho más que a sí mismos. Pero ¿significarían algo Dios y las cosas sin vosotros? Por eso, solo con Dios y todas las cosas juntos en vosotros, podéis realmente definir el valor de Dios, el hombre y todas las cosas. Debemos ser capaces de mirar hacia la tierra y mirar hacia el firmamento, hacia el cielo.
¿Es la felicidad algo ya realizado, de forma que podéis ir a buscarla? ¿O es algo que estáis creando? ¿Cuando decís que seréis felices cuando tengáis vuestra compañera, podéis crear a esa muchacha? (¡No!) Si decís que vais a ser felices cuando tengáis un gran diamante, podéis hacer el diamante? (¡No!)  Eso significa que vosotros no podéis hacer la felicidad. Nos vemos obligados a decir que la felicidad es algo que ya está ahí. Los hombres y las mujeres ya están existiendo. Hay felicidad en todas partes, solo que no está ligada a vosotros. Originalmente había felicidad. Pero la gente ha estado tanteando en las tinieblas en busca de felicidad, en vano.
¿Qué significa eso? Ellos se esforzaban mucho buscando la felicidad porque sabían que la felicidad existía en alguna parte. ¿Entonces dónde encontramos esa felicidad? Viene con la vida. En el momento en que habéis nacido, se os ha dotado de felicidad.
¿Entonces de dónde viene la felicidad? Son vuestros padres quienes os dieron nacimiento, por eso debería venir de vuestros padres. ¿Cuál es la fuente de la felicidad de vuestros padres? Son vuestros abuelos. ¿De dónde viene entonces si seguís retrocediendo? (¡De Dios!) Sois el producto del amor de Dios. Por eso, al nacer aquí, habéis nacido con el amor de Dios, por tanto habéis nacido con la felicidad. Toda vuestra vida viene del amor de Dios. Así mismo, vuestra felicidad debería venir de Dios. Ese amor y felicidad se os concedieron en vuestro nacimiento, ¡pero de alguna forma los perdisteis! Tenéis que buscarlos de nuevo y encontrarlos, restaurando el amor de Dios en vosotros.
¿Cómo es que el hombre no ha podido encontrar el amor de Dios o la felicidad? Se debe a la Caída Humana. Pero al ser por la Caída, ese amor de Dios, esa felicidad de la fuente de Dios, podrían haber sido vuestros después de vuestro nacimiento. Por eso si restauráis a Dios en vosotros, al verdadero hombre en vuestro interior, y al verdadero valor de todas las cosas en vosotros mismos, el amor y la felicidad deben habitar en vosotros. Por eso, nuestra última meta es recibir al Mesías. Debemos ser capaces de restaurar todas las cosas y restaurarnos a nosotros mismos como auténticos hombres, al recrearnos en Abel antes de la Caída. Solo entonces podemos ir al Mesías. Abel esta en la posición de ofrenda a Dios. El representa a todas las cosas. Abel está también en la posición de Adán antes de la Caída. Antes de la Caída Adán estaba unido con Dios, Dios estaba en él, y él estaba en Dios. Antes de la Caída, Adán representaba a Dios, a todos los hombres, y a todas las cosas. Solo entonces podéis estar en la esfera de amor divino. Esa es la descripción de la restauración completa del hombre. Se puede aplicar en los niveles individual, familiar, nacional, y mundial.
¿Entonces quién es el Mesías? ¿Cómo es? Decimos que Dios necesita al Mesías y los hombres necesitan al Mesías, pero ¿cómo es? El representa a los hombres, a Dios, y a todas las cosas, en los niveles individual, familiar, nacional, mundial y cósmico. Su canal está abierto para abarcar a todos y cada uno. Dondequiera que vaya, es bienvenido por todos, incluso en el mundo espiritual. Esa es la personalidad que queremos conseguir. El Mesías es esa clase de persona. Dios le necesita y le da la bienvenida. Toda la humanidad le da la bienvenida, y todas las cosas le dan la bienvenida. Solo la gente satánica no le darán la bienvenida porque son hombres de tinieblas, hombres caídos. ¿Hay en el mundo más hombres caídos o más hombres de Dios? (Caídos.) Las religiones están esforzándose mucho para restaurar a más gente al lado de Dios.
Aún necesitáis al Mesías, ¿con ésta necesidad podéis tener ya la verdadera felicidad? (¡No!) Solo al descubrir al Mesías, y al uniros con él podéis heredar lo que tiene. Ese es el camino donde encontráis a Dios. Adán, antes de su Caída, tenía cosas en común con Dios, y el Mesías también tiene cosas en común con Dios. ¿Sois ya vosotros así? (¡No!) Debéis ser capaces de tener no solo algo, sino tener todo en común con Dios. Los estudiantes del seminario de teología están orgullosos de encontrarse allí, vosotros estudiáis mucho, pero al estudiar debéis tener algo en la mente. El conocimiento teológico solo no significa nada. Vuestro corazón y celo hacia Dios, y saber cómo aplicar esas cosas en vuestra vida diaria ‑ todo eso determinará lo que vais a ser. ¿Podéis restauraros en el verdadero sentido si Dios está todavía muy por encima de vosotros? Cuando estéis unidos con Dios, ¿habrá algo que os separe? (¡No!)
Cuando penséis en la relación entre Dios y vosotros, debéis ser capaces de rechazar la tentación que venga de alguna dirección en la forma de amor mal dirigido. En realidad, el mundo entero está bajo la dominación satánica, por eso debéis manteneros alerta. Dondequiera que vayáis, debéis estar seguros de que no seréis tentados por alguna seducción satánica. Al contrario, debéis pensar que sois el salvador de todos los demás, del mismo modo, debéis ser capaces de salvar a esa gente de la tentación mala. Entonces estaréis capacitados para ser el segundo Mesías, o el segundo salvador. Esa es la calificación para ser hijos e hijas de Dios. Vuestra actitud debe ser: "Ningún poder malo está capacitado para seducirme. El mundo entero está en la posición del arcángel. Por eso, estáis en la posición de ser dominados por mí, no de dominarme. Tengo a Dios como mi Padre, por eso todo lo que pertenece a Dios es mío." Lo que pertenece a Alemania es mío, lo que pertenece a América es mío ‑ ¿podéis decir eso? (¡Si!) Debéis tener toda confianza. Esa clase de "Yo" está capacitado para estar en el mundo original del dominio de Dios. Siempre que consideres que los asuntos de amor prevalecen en este mundo, debes proponerte exterminar todo eso con tus propias manos. ¿Le agradaría a Dios la libertad sexual? (¡No!) Si veis que esas cosas se hacen en vuestro vecindario, vuestros parientes, en vuestra familia, debéis ser capaces de cortarlas de raíz. Debéis decir que ni siquiera las miraréis nunca . O, si es posible, que exterminaréis esas cosas. Dondequiera que vayáis, debéis estar en la posición de sujeto. Debéis estar orgullosos de ser el segundo Mesías para salvar al resto del mundo de la cárcel del mal.
El primer Mesías, Jesús, fue crucificado en la cruz. Debéis preguntaros, "¿;No puedo ir yo a través del sufrimiento de la cruz?" Debéis hacer cosas más grandes que las que hizo Jesús. Debéis ser una persona más grande que Jesús. Si realmente estáis capacitados para ser hijos e hijas de Dios, el mundo entero será vuestro. Entonces, los hombres serán vuestros, de forma que, cuando veáis a alguien pisoteado por el poder satánico, debéis decir, "Este es mío. ¿Cómo puedes invadir mi propiedad?" Debéis sentir que todo el universo quiere estar bajo vuestro dominio. Cuándo estáis en la naturaleza, ¿sentís que todo el universo está danzando de alegría por teneros allí? Si sois sensibles espiritualmente, veréis y oiréis que la naturaleza os habla. Podréis hablar libremente con los hombres espirituales. Cuando converséis con los hombres espirituales, descubriréis que esa gente conoce lo que es la verdadera felicidad, y que os envidian porque tenéis el amor divino. Ellos aguardan impacientes el amor de Dios. Antes que esa gente, vosotros seréis profundamente felices porque tenéis el amor divino, queréis sonreír de una oreja a la otra. Sentiréis que gritáis con todas vuestras fuerzas, “¡Soy la persona más feliz del mundo!", y vuestra voz resonará por todo el cosmos. Vuestra felicidad será contagiosa, haciendo feliz a la gente. Cuando seáis así, estaréis capacitados para estar en el mismo nivel que Dios, disfrutando de la felicidad de Dios, la felicidad del hombre, y la felicidad de todas las cosas, todas reunidas en vuestra felicidad. Solo en el amor podéis estar unidos con El.
El tema esta tarde era "Dios y yo." Dios y yo somos felices cuando estamos unidos en uno en el amor divino. Debemos ser capaces de hallar ese amor de la más alta dimensión. Si habéis tenido la experiencia de amar a vuestro marido o esposa, eso no es nada comparado con el amor divino que sentiréis. El amor que habéis experimentado estaba por debajo o como mucho en el mismo nivel que el del arcángel. Así que podéis imaginaros cuanta más excitación e intoxicación habría, cuando realmente sintierais el amor de Adán antes de la caída, en unión con Dios. Estaréis intoxicados con el amor divino. Estaréis borrachos con el amor de Dios, y os durará para siempre. (Carcajada.) Cuando echéis de menos a alguna persona en ese estado la echaréis de menos con todo vuestro cuerpo, incluyendo vuestros cinco sentidos. Os olvidaréis de dormir, de comer. En ese caso, la sensación del amor es mayor que un rayo. Todas vuestras células estarán estimuladas por el amor. Oiréis a cada célula gritando de alegría.
Si experimentáis esa clase de amor, no podréis negar nunca a Dios. Ese es el modelo de la verdadera felicidad para la humanidad. En ese caso, estaréis con Dios en el mismo nivel, y seréis quien pueda hacer feliz a Dios eternamente. Eso significa que Dios no puede ser feliz sin ti. Es el derecho de cada ser humano hallar tal felicidad y disfrutarla. Debéis amar a vuestra nación más que cualquier otro lo haga. Debéis amar a vuestros padres más que ninguna persona los ame. Al amar a vuestros hermanos y hermanas, parientes, y amigos, debéis amarlos más que cualquiera. Al amar a la naturaleza, debéis amarla más que cualquier otra persona pudiera amarla. Entonces os pertenecerán. Si alcanzáis ese dominio, sentiréis el misterio de la vida, estaréis embriagados con el amor de Dios. Qué maravilloso debe ser eso.
El camino más seguro para ser así es conocer a Dios. Cuando sepáis que Dios tiene sobre su espalda la carga más pesada, debéis ser capaces de echaros la carga a vuestra espalda. Entonces Dios trabajará contigo. Cuando estéis absortos con esa clase de pensamiento, podréis mirar a la naturaleza y decir, "Yo llevo la carga en lugar de Dios." Cuando miréis a los hombres, podréis contarles, "Tengo la carga de Dios sobre mi espalda." Sentiréis el privilegio de hacerlo, y sentiréis alegría por ello. En ese caso, por muy amarga que sea la situación en la que estéis, no os quejaréis sino en vez de ello os alegraréis. Si llegáis a ser esa clase de persona, comparaos con la gente ordinaria. Entre los dos niveles hay un gran abismo. En ese caso, podéis decir que sin mí, las cosas no pueden alegrarse. Sin mí, la iglesia no puede ser perfecta. Sin mí, el grupo entero, el seminario de teología ‑ nada será perfecto. Entonces podéis estar seguros de llegar a ser la luz del mundo, brillando en cada dirección. Si llegáis a ser así, cualquier persona se verá atraída hacia vosotros, os echarán de menos y desearán impacientemente estar con vosotros. Vuestra bondad será detectada desde el mismo momento que os encuentren.
Aquellos que me veis en oraciones, visiones y sueños, levantad la mano. Quiero que todos vosotros tengáis esas experiencias. Es natural que todos los miembros me veáis, ya sea en visiones o sueños, enseñándoos siempre lo que tenéis que hacer. Eso es lo que tenemos diferente en este movimiento. En el pasado, el hecho de que los creyentes en Cristo le vieran en visiones o sueños les costaba muchos años de vida de oración. Pero en el movimiento de Unificación, si oráis con fuerza, eso sucederá en un tiempo de siete días, o de siete meses como mucho. Estoy seguro de que habrá algunos que ya me hayan visto antes de unirse al movimiento. ¿Por qué ocurriría eso? Es porque el amor divino domina todo el mundo, eternamente. En el mundo espiritual un año corresponde a miles y millones de años. No hay diferencia entre hoy y mañana. Trasciende el tiempo y el espacio.
Después de que hayamos establecido un fundamento nacional, después de haber restaurado una nación, vendrá la luzdel día, como el amanecer después de la oscuridad nocturna. El mundo entero brillará a causa de la luz emitida por nosotros. Debéis sentir la bendición de ser miembros de la Iglesia de Unificación. No os dejéis llevar por el azar. Donde estéis situados ahora no será el nivel donde permaneceréis. Debéis ir más y más profundo, más y más alto. No es estudiando en el seminario de teología donde adquirís eso. Debéis cultivar vuestro ser interno, por medio de oraciones y práctica. Debéis ser capaces de amar a la naturaleza como si fuera vuestra, amar este edificio, amar a todo lo que hay aquí como si fuera vuestro. Amar a la gente de aquí como si fuera vuestra. Ese es el modo como debéis entrenaros. Ahora que habéis aprendido como conseguir la verdadera felicidad, quiero que lo pongáis en práctica en vuestra vida diaria.
No suelo hablar mucho sobre el mundo espiritual. Si hablara siempre sobre el mundo espiritual sería demasiado para vosotros. Una vez que hayáis formado vuestra personalidad adecuadamente con Dios, los hombres y todas las cosas unidos en vosotros, entonces podré realmente daros a conocer la naturaleza completa del mundo espiritual. Aunque para mí la tarea de mi vida es investigar el mundo espiritual y traer a la luz todo lo que hay allí. Si quisiera poner mi antena para alcanzar el mundo espiritual y concentrarme discriminando el bien y el mal y lo que habéis hecho en el pasado, podría seleccionaros. No debéis juzgarme por mi apariencia exterior, porque yo bajo a vuestro nivel para elevaros. El nivel en el que finalmente vais a estar será el mayor según el modelo de Dios. Quiero que cultivéis el sentido espiritual. Tratad de verme en vuestros sueños y visiones tantas veces como sea posible. Después de un día de duro trabajo de fundraising, puede ser que en vuestra vuelta en el autobús os adormiléis. Muy probablemente me veréis en una visión. No estaréis completamente dormidos, pero me veréis. Al estar cerca mía sentiréis cómo es el amor divino. Cuando estéis en la calle y la gente os ponga motes u os ignore, podríais abatiros profundamente en desesperación y frustración. Si, entonces, consoláis el corazón de Dios ‑ "¡Qué triste debes estar!" ‑ inmediatamente me veréis yendo hacia vosotros con miríadas de gente siguiéndome. Entonces os sentiréis más cerca de mí que de vuestros padres físicos, vuestros hermanos y hermanas, profesores, o amigos. Al sentir mi amor por vosotros, podéis sentir el amor de Dios por vosotros. De ese modo, sentiréis y conoceréis que Dios está muy cerca de vosotros, casi dentro de vosotros. El pecado es como una enfermedad crónica, por eso no sentís ese tierno sentimiento y amor hacia Dios. Queréis restaurar eso. Si tuvierais ese sentimiento cultivado en vosotros, casi podríais predecir lo que va a ocurrir cada día, a quién vais a encontrar.
Esa clase de persona no tiene ningún miedo a la muerte porque cono­ce a qué nivel del mundo espiritual está encaminado.

Os dije todo esto con  el objeto de ayudaros a formar vuestra personalidad íntegra, combinando a Dios y todas las cosas dentro de vosotros, para que podáis ser restaurados al estado original an­terior a la Caída. De otra forma no podéis dirigir a otra gente, o llegar a ser salvadores de la gente para convertirles en personas como vosotros. En el estado inicial, si veis que vosotros no sois así, debéis ser humildes. Siempre debéis estar sirviendo a los de­más. Si tenéis tal actitud, podréis abrir el camino.