El momento crucial de la historia
1 de diciembre de 1975
Tarrytown, Nueva York
Reverendo Sun Myung Moon
En la historia del mundo, la
dispensación de la restauración se ha repetido tres veces debido a los fallos humanos.
Originariamente, no debería haber habido una dispensación de restauración. La
necesidad de la restauración y las subsecuentes repeticiones radican en último
en un solo incidente: la caída. Dios, Satán y el hombre se han encarado el uno
con el otro. Su interacción ha constituido la historia, por una parte, el
lado celestial lidiando para fijar puntos de cambio que restaurasen la posición
original, por otra parte, el lado satánico luchando para mantener su dominio.
El asunto siempre ha sido determinar si Dios o Satán ganarían la transición
victoriosa.
Las religiones existentes nunca se
han dado cuenta de que el hombre tiene una responsabilidad crucial en
transformar el mundo del mal. Han creído que si Dios deseo algo se cumpliría.
Han asumido que si Dios anhela algo, Satán no podía oponerse. La teología
de unificación dice que el hombre mismo debe hacerse responsable. Decimos que
no podemos tener éxito en el giro transicional a no ser que echemos a Satán. El
hombre debe tomar la iniciativa, ser un líder. Dios, por Su lado, trata de
restaurar al hombre mediante gente buena. El lado del mal se opone a la
restauración usando gente mala. La historia ha progresado basada en la
repetición de estas luchas.
Caín representa el lado de Satán
mientras que Abel el lado de Dios. No pueden evitar el choque. El lado de Dios
representa el lado interno, el lado de Caín el lado externo. Caín y Abel
experimentaron esta lucha, y en la misma, Satán finalmente salió ganando.
Si hubiera ganado el lado de Dios la historia se hubiera dirigido en ese
momento de transición hacia el bien.
En tiempos de Noé y Abraham, Satán
ganó más batallas y pudo frustrar los intentos de provocar el giro transicional
hacia el bien. En cualquier momento de giro transicional en la historia,
el cielo siempre ha luchado basado en tres etapas o generaciones representando
el testamento Antiguo, el Testamento Nuevo y el Testamento Completo, o
las etapas de formación, crecimiento y perfección. Abraham, representando la
humanidad, trató de provocar un cambio completo haciendo una ofrenda simbólica.
Pero debido a que no cortó las palomas en dos, la condición no fue establecida.
El curso de la familia de Abraham paso entonces por tres etapas, de
Abraham a Isaac y Jacob. Y finalmente, por primera vez, se logró un giro
transicional victorioso en el tiempo de Jacob.
Jacob marca el momento crucial
Cuando Jacob ganó la victoria por
primera vez, toda su familia pudo seguir el camino al cielo. ¿Cuál fue el
siguiente reto? ¿Qué es siempre crucial después de empezar una nueva tradición?
Pasarlo a los descendientes.
La nueva tradición que sus
descendientes debieron seguir era el pensamiento, la fe, y las acciones
con las que Jacob consiguió la victoria. Jacob, aunque era un individuo, puso
las condiciones de indemnización representando la historia. Por tanto, el giro
transicional que él consiguió, tuve que pasarse a la familia y a la
tribu. Tuvieron que heredar la tradición con la que Jacob consiguió la
victoria. Este es el curso de Jacob que estudiamos en el principio.
Pero para que el pueblo de Israel
pudiese heredar la victoria histórica sobre Satán tenían que seguir el camino
de su familia a lo largo de la época de Moisés. No importa lo difícil que fuera
su curso, tenían que observar esta regla en tiempos de Moisés. Tenían que
aplicar esta norma a dondequiera que fueran, no sólo en los límites de sui
país. Además, tenían que lograr el giro transicional en el nivel de raza o de
pueblo en tiempos de Moisés.
Satán siempre está un paso
adelantado. En el país forastero de Egipto, Dios y la gente de Dios tuvieron
que vérselas con Satán,la gente y el país de Satán. Cuando Dios pudo reunir a
Su pueblo, Satán ya tenía una nación. Satán tenía el mundo. Siempre luchar de
esta manera desproporcionada. Moisés, a pesar de ser Israelita, era el un jefe
en el palacio del Faraón. En el palacio, al representar a loa egipcios,
era un hombre del lado de Satán. Pero Moisés abandonó el palacio y cambio. El
día que cambió, Moisés formó parte del pueblo de Israel, del lado de Dios. Ya
no era el Moisés del palacio, morando en el lado de Satán.
Moisés pudo poner el fundamento de
su raza, su pueblo en los 40 años en el desierto de Median. Moisés y el pueblo
se unieron y lucharon contra el palacio del Faraón. El lado de Dios y el
lado de Satán lucharon y el lado de Dios sometió al lado de Satán. Los
israelitas viajaron tres días antes de alcanzar el Mar Rojo. El periodo de tres
días también fue significativo en tiempos de Jacob cuando volvió a Canaán.
Después de ganar esas batallas, la
gente israelita empezó su éxodo, poniendo fin a 400 años de esclavitud en
Egipto. No obstante, no fueron directamente a Canaán, sino que erraron 40 años
en el desierto. ¿Por qué fueron por este curso? Debido a que los israelitas no
estaban dispuestos a arriesgar sus vidas para conseguir la meta. No
pudieron centrarse sólo en Dios. Su forma de pensar era humanista y ligado aún
al mundo satánico.
La victoria que Moisés obtuvo en
Egipto fue la tradición que el pueblo de Israel tuvo que heredar desde el
momento en dejó atrás a Egipto hasta que volvieron a Canaán y establecieron el
fundamento nacional, esperando al Mesías. A no ser que siguiesen y
obsediesen de todo corazón ésa tradición, no podrían heredar el fundamento de
victoria
como
pueblo o producir el momento de cambio a escala nacional. Este
fundamento era crucial ya que de la ampliación del mismo dependía la llegada de
Jesús a escala nacional y la inauguración de la era mesiánica.
La escala nacional es un paso
superior a la de pueblo. La nación consiste de familias y estirpes. En
consecuencia, en la era nacional, las condiciones para restaurar familias
y estirpes no tenían que ser repetidas individualmente. Por tanto, cuando Jesús
vino como Mesías, bastaba con poner el estándar nacional exitosamente para
lograr los requisitos de restauración familiar y de estirpe.
¿En qué se centró Moisés para
cumplir la restauración del pueblo o la estirpe? En heredar la tradición de
Jacob, de los padres. Debéis entenderlo. Moisés heredó la tradición que Jacob
dejó tras de sí, y representaba la siguiente meta en el proceso de desarrollo
desde Jacob. En el proceso de desarrollo, no puede hacer etapa de crecimiento
sin etapa de formación, ni etapa de perfeccionamiento sin etapa de crecimiento.
Por tanto, si la era de Jacob fue la etapa de formación, Moisés vino
sobre ese fundamento en la etapa de crecimiento. En el proceso vertical de la
historia, Moisés heredó el pasado a la vez que figuraba el presente. El
giro tradicional apuntaba hacia el futuro. Así pues, Moisés se decidió i
r hacia adelante. A partir de este giro transicional se determinaron los
conceptos de pasado, presente y futuro.
La familia de Jacob pasó por las
etapas de formación y crecimiento, avanzando al nivel de completa fe. Siguieron
la formula de tener éxito erigiendo tres etapas, pasado, presente y futuro.
Sin hacer condiciones Moisés no
podría decirle sencillamente a la gente” ¡Vamos a Canáan!” Podía empezar
a formar una nación sólo después de haber pulido todos los fallos cometidos
desde el tiempo de Jacob hasta el suyo poniendo un fundamento que prescindiera
de Satán. La formula es el mismo. ¿Qué hacer después de entrar en la era
nacional? Jesús debía apoyarse sobre el fundamento victoria de Moisés. Ya que
el fundamento de Moisés era el del pueblo, Jesús no podía tener éxito sin
heredar la posición de Moisés, eliminando toda condición de invasión satánica.
La nación de Israel y la gente que
Moisés guió debía convertirse en el fundamento para Jesús. Por eso, todos los
fallos del tiempo de Moisés deberían ser limpiados en el tiempo de Jesús. Una
vez que hubiera preparado y limpiado el fundamento del pueblo y lo hubiera
conectado con el fundamento nacional, Jesús podía subir a escala mundial.
Sólo de esa manera podía Jesús ir as una dimensión más elevada.
Ya que el giro transicional sólo
puede hacerse cuando se asegura la tradición del nivel anterior, cuando no se
garantizó el fundamento nacional en tiempos de Jesús, la posibilidad de
restauración mundial se perdió. Todas las condiciones establecidas internamente
en Dios y externamente en Jesús, debería haber creado el fundamento nacional
con el que hacer frente a Roma y al mundo satánico. Si hubieran creado un
giro transicional nacional, la nación de Israel habría existido eternamente en
la tierra.
Después del tiempo de Jesús, tanto
judíos como no- judíos deberían haber seguido la tradición de Jesús, uniéndose
y creando un fundamento nacional. ¿Qué ocurrió con la muerte de Jesús? ¿Se
perdió el giro transicional en la tierra o se mantuvo?
El Cristianismo
Los cristianos actuales dicen que
todo está hecho con sólo creer en Jesús. No es así empero. Por la muerte de
Jesús en la cruz, los cristianos perdieron el fundamento terrestre con el cuál
restaurar el pasado, presente y futuro desde el nivel individual hasta el
nacional. ¿Dónde deber acaecer el giro transicional? Deber ocurrir en la
tierra. Debido a que un ser de carne y espíritu cayó, personas de carne y
espíritu deben regresar a Dios como individuos, familias, tribus, naciones y el
mundo. A causa de la muerte de Jesús, todos esos niveles fueron perdidos.
Los seguidores de Jesús deberían
haber creado el fundamento espiritual que abarcara el mundo en aquel tiempo.
Fue el tiempo adecuado para provocar el giro transicional en la tierra y saltar
a escala mundial. La muerte de Jesús impidió el camino hacia las etapas
nacionales y mundial empero y los cristianos tuvieron que iniciar un movimiento
espiritual para lograr el ideal de Dios. ¿Puede el cristianismo heredar la
tierra? Ante todo debían entender la situación de Jesús y heredar su
traición. Debéis entender que a causa de la muerte de Jesús el
cristianismo se convirtió en un movimiento espiritual. ¿Cuál es la victoria
espiritual de Jesús? Significa que se estableció un ambiente victorioso
espiritual en el que los seguidores no son violados espiritualmente en la
tierra. Lo que los cristianos deben saber es que por qué Jesús oró:” Padre mío,
si es posible que pase de mí esta copa, pero no se haga como yo quiero sino
como Tú quieres”. De aquí podemos deducir que los cristianos no pueden lograr
el ideal de Dios sin unirse con la Voluntad del Padre Celestial, tal y
como Jesús oró en el huerto de los olivos.
Está claro que con la muerte de
Jesús Dios perdió el fundamento terrenal establecido por Moisés. Externamente
las circunstancias empeoraron más que antes de la venida del Mesías. Los
cristianos, el segundo Israel, no tienen una nación, una tierra. Son como los
miembros de una familia sin la cabeza de familia. No hay garantías de que Dios
pueda proteger a la gente por el que preparó el fundamento individual, de
familiar, tribal y racial. A pesar de que Dios es todopoderoso, no
tenía fundamento para defender al segundo Israel. Por eso el cristianismo ha
sufrido miserablemente en la historia de las religiones. El cristianismo ha
sido una religión de mártires. La gente se preguntaba que si Dios
realmente existe, entonces ¿por qué tuvieron los cristianos que padecer un
camino de tanto sufrimiento como individuos y como grupo? Podemos darnos cuenta
de que Satán tiene derecho a atacar físicamente siempre que no hay un
fundamento para el individuo, la familia, el clan o la nación en la
tierra.
La Segunda Venida
¿Debe Jesús retornar? Absolutamente.
Muchos cristianos dicen que da igual si el Mesías viene o no, que no es
necesario. Otros creen que vendrá en las nubes y que achicharrara todo, y que
el mundo será transformado sin más, tal y como Jesús y Dios desean. ¿Ocurrirá
de esta forma? Estos pensamientos cristianos se apartan demasiado de la
historia de restauración y perecerán. Las personas con este tipo de fe nunca
podrán ver al Señor de la Segunda Venida
¿Vendrá el Señor de la Segunda
Venida en la gloria? ¿Tiene la autoridad para superar lícitamente al individuo,
la familia, y la nación satánicas? Para venir sobre un fundamento nacional el
Mesías debe heredar antes el fundamento de un pueblo. Pero antes de eso, debe
primero crear un fundamento familiar perfectamente purificado. Sólo entonces
podrá descansar firmemente en el fundamento nacional. Sin esta base el Señor de
la Segunda Venida no podrá venir en la gloria. Así se cumplirá la
profecía que vendrá padeciendo mucho.
La situación actual del
cristianismo es como nubes flotando en el aire. Cuando el viento sopla las
nubes se desplazan. El cristianismo es la religión nacional de muchas naciones.
Pero no poseen una victoria terrenal en el plano individual, familiar, o
tribal. No han establecido una nación escogida.
¿Entonces, cuál será la tarea que
el Señor de la Segunda Venida debe desempeñar cuando venga? No puede
alcanzar o salvar el mundo a no ser que recree un fundamento substancial en el
nivel individual, familiar tribal y nacional, todos ellos perdidos por la
nación de Israel. Sin reconstruir esos niveles no puede consumar el
cristianismo mundial.
¿Dónde se ha asentado el
cristianismo, errando por 2.000 años? ¿Pensáis que algo se asienta exitosamente
en los EEUU cuando no lo ha logrado en ningún otro sitio?
¿Dónde pude Dios obtener Su base?
La dispensación no tuvo éxito en Roma, o en Inglaterra, ni tampoco en la nación
cristiana de los EEUU. Por eso, Dios preparó Su base en una pequeña nación de
Asía. Necesitaba encontrar una nación que tuviera una larga historia de más de
4.000 años. Tenía que ser una pequeña nación de un tamaño manejable. Necesitaba
una nación con un pueblo homogéneo. Tenía que ser una nación que nunca hubiera
invadido a otra, y su gente debía poseer una cultura distinguida. Tenía que ser
una nación que conserva un legado nacional fuerte, a pesar de haber sido
un estado dependiente o haber sufrido una situación inestable. También,
la gente de esa nación debe haber padecido mucho porque debe indemnizar el
sufrimiento del mundo.
La nación escogida
En la historia, sólo dos naciones
han cumplido esas condiciones. Una es Israel. Los israelitas estuvieron errando
sin una nación. Con el fin de recibir al Mesías, empero, perseveraron como una
nación sin territorio a pesar del trato severo y la persecución. La otra nación
es Corea, los coreanos han sido llamados los judíos de Asia. Corea ha podido
asimilar la cultura occidental sin ser minorado por la misma. Ha sido dominado
por el lado satánico, al igual que Israel que fue gobernado por Roma.
En 1948, Israel ganó la
independencia y por eso algunos creen que el Señor volverá a Israel. Pero
Coreo también se independizó en 1948. En contraste con la situación israelita,
Corea fue liberado de la colonización japonesa, empero. Pasiblemente, ambas
naciones puedan haberse independizado a la par debido a que el Israel físico
heredó algo del Israel espiritual, Corea. El hecho que los judíos, que vagaron
por 2.000 años, pudieron encontrar de nuevo su nación, significa sus pecados
fueron perdonados. Por eso, pudieron volver a su patria originaria. La profecía
que Israel sería restaurado cuando Jesús vuelva, ha sido cumplida. A causa de
que la muerte de Jesús fue restituido, la humanidad pudo recibir perdón y la
Segunda Venida pudo producirse.
¿Pensáis que el Señor de la segunda
Venida tendrá una vida ostentosa o que pagará mucha indemnización si viene a
Corea? Debe resistir muchas cosas yendo el camino de la indemnización,
debe desarrollar mucha perseverancia. Los coreanos, que les gusta la comida
picante, describen a tal persona como”alguien que puede comer pimientos
sin llorar”.
Se puede comparar la situación de los cristianos
coreanos a la de los líderes judíos del pasado, exceptuando que cristianos sólo
disponen de una base espiritual flotando en el aire. La mente o el espíritu va
donde está el cuerpo, si los cristianos encuentran a un grupo que recibe al
Mesías, el espíritu podría bien moverles a seguir ese grupo. Puede que el
Mesías aparezca mediante un movimiento nacido en Corea, que carga con la misión
histórica de Dios. ¿Cuál es ese movimiento? El movimiento de unificación
es el foco del Espíritu de Dios e intenta unir el cristianismo y al
mundo.
El curso del Mesías
¿Qué significa todo esto? Significa que el
Mesías ha venido. Si en vez de oponérsele la gente le hubiera aceptado, el
proceso de restauración hubiera acabado en siete años, las condiciones de
indemnización para la familia, la tribu, y la nación hubiera unido todos los
niveles. La independencia corea fue declarado en 1948, siete años después de la
liberación de Japón en 1945, en 1952, la restauración podría haberse
realizado. Dios acabó la creación en una semana, descansando en el séptimo día.
¿Qué hice en esos siete años? Estuve en la cárcel. Permanecí allí y permanecí
allí hasta que fui liberado en 1950. Los discípulos de Jesús se dieron a la
fuga cuando tuvo que enfrentarse a la crucifixión. Cuando estuve en la
cárcel pude, empero, encontrar a 12 discípulos. De esta manera, la restauración
por indemnización pudo iniciarse. Empecé a predicar en el ámbito
democrático, pero los cristianos se opusieron a mí. También representaba el
fallo de la democracia en aquel tiempo. Debido a que me encontré con
hostilidad doméstica en Corea del Sur, me vi obligado a ir al campo enemigo, la
Corea del Norte, controlada por el comunismo, para recupera lo perdido.
Familias bendecidas restauradas
A partir de ese momento, la recreación pude empezar
de nuevo. Trabajé para formar una familia desde la posición de Jacob, o a nivel
individual. Empecé mí familia en el año 1960, 14 años tras la liberación de
Corea. Para restaurar los fallos cometidos en el tiempo de Jesús, pasé las
etapas de formación y crecimiento, comprendiendo cada etapa siete años. Jacob
también trabajó 14 años para establecer su familia. Por tanto, en el año 1960
la familia de Dios pudo empezar a separarse de la familia de Satán.
Quise formar familias a escala mundial, creando la
nueva dimensión de bendición del nuevo Israel. El tercer Israel se
compone de familias bendecidas. A partir de 1960 alcanzamos el nivel mundial de
restauración, pasando por el proceso histórico de la era de la familia, de la
de clan, de la tribal, y la era de la nación.
Hasta ahora, la iglesia de unificación ha estado
formando clanes y tribus centrado en las 12 parejas que representan las
familias de Jacob. Las 36 parejas representan tres etapas de 12 parejas.
Un proceso de restauración implica 36 parejas, una familia es la extensión de
36 generaciones. Si añadimos las familias de Caín y Abel, sumamos 72 parejas.
Por medio de la bendición debemos encontrar a las familias históricas
originarias que se perdieron, y debemos restaurarlas.
Jesús, para cumplir la Voluntad de Dios, debería
haber bendecido primero tres discípulos y luego el resto de los
doce. Nosotros también debemos complementar el número 12. Si se amplía este
número horizontalmente mediante el pasado, presente y futuro, deviene 36
parejas. Si ampliamos las etapas de formación., crecimiento y
cumplimiento horizontalmente, también obtendremos 36 parejas.
Hubo 10 generaciones de Adán a Noé y otras 10 de
Noé a Abraham. Este número 10, al incluir a Caín y Abel o Isaac y Jacob,
presupone el número fundamental 12, empero. Si multiplicamos por las tres
etapas de formación., crecimiento y cumplimiento el número 12, nos da el
número 36. Éste es el origen de las 36 parejas bendecidas.
Multiplicado por el nivel de Abel y Caín los 36 parejas devienen 72, representando una tribu. La
siguiente escala de bendición es el número 124. Corresponden a los 120
discípulos con las que Jesús emprendió su curso espiritual. Son los
representantes de las naciones del mundo. La intención de Jesús fue
bendecir e unirlos, conectándolos a la nación de Israel. ¿Si Jesús hubiese
bendecido a sus 120 seguidores y si la nación de Israel le hubiese recibido,
hubiese sido matado? Por supuesto que no. Tuvimos que restituir lo que él no
consiguió y bendecir a 36, 72 y 124 parejas en tres años.
Después vienen las 430 parejas. Los números 4 y 3
suman 7. Los números 4 y 3 simbolizan siempre una liberación. El pueblo
de Israel inició su éxodo a la tierra prometida después de 430 años. En
la historia coreana, la liberación de Corea ocurrió en el año 4300, según el
calendario coreano. Después de 4300 años, Corea pudo ser la nación escogida.
Por tanto, 430 años es el periodo para la restauración de la nación de Israel.
Cuando el fundamento alcanzó la escala nacional, bendije a 43 parejas del mundo
occidental. El número 43 es un submúltiplo del número 430.
La bendición de 777 parejas fue la siguiente, con
personas de 10 naciones. Ésta bendición abrió el camino al nivel mundial. La
iglesia de unificación esta formando una nueva tribu y una nueva nación.
¿Entendéis lo que está pasando? Si no comprendéis lo que esta pasando hasta el
momento no entenderéis la dispensación que viene a partir de ahora. Debéis
heredar y observar la tradición, pero ¿cómo lo haréis si ni siquiera la
entendéis?
En febrero de 1975 bendije a 1.800 parejas.
Debí celebrar esa bendición dentro de los 14 años tras el inicio de la
dispensación en abril de 1960. La bendición de 1.800 parejas cerró el segundo
curso de siete años de la iglesia de unificación ya que preparó el fundamento
perfecto para extendernos a escala mundial. Seis es el número de Satán, 1.800
es un múltiplo del número 18, que es total de la suma de tres seises.
Representa el dominio del mundo satánico. El primer seis representa la etapa de
formación del lado satánico, el segundo seis representa la etapa de crecimiento
del lado satánico y el tercero seis representa la etapa de cumplimiento del
lado satánico. Así se preparó el fundamento mundial, por eso, a partir de ahora
podemos movilizar la nación y el mundo.
La concentración de Yoido
Centrado en la concentración de Yodio del pasado
junio en Corea, celebramos varios mítines. Los preparativos empezaron en
febrero, y el evento alteró por completo la fortuna de Corea. Tuvimos que
invertir la trayectoria de las iglesias establecidas y también conseguir
victoria en otras áreas. Estas actividades han enlazado a Corea con los niveles
del individuo, de la familia, de la etnia, de la nación y del mundo. Este
vínculo espiritual ha dado a Corea un fundamento sustancial a
escala mundial.
Pudimos abrir el camino para llegar al mundo
conectándonos espiritualmente mediante condiciones tales como el curso de tres
años en los EEUU desde el año 1972 al 1974. Antes de eso, trabajábamos a escala
tribal e étnico. No obstante, a partir del año 1972 he enviado a miembros
al mundo trayendo una victoria espiritual a través del curso de tres años en los
EEUU:
Para extendernos a escala mundial, ahora que el
estándar nacional está establecido, en los tres años siguientes debemos fundar
el estándar del mundo cristiano sustancial, vinculándolo al fundamento del
cristianismo espiritual. En los tres años que siguen debemos movilizarnos
a escala mundial enlazando el fundamento sustancial con el espiritual. Este
periodo corresponde, a escala mundial, con los tres años de misión pública de
Jesús.
El fundamento para que todo esto ocurra ha sido el
mitin de Yodio. Con ello, alcanzamos el nivel de las iglesias establecidas y de
la nación y preparamos un fundamento victorioso tanto espiritual como
físicamente. El curso providencial de tres años empieza aquí en los EEUU.
Los tres años venideros
Espiritual y físicamente, es el momento de
transición, de cambio para el mundo. Debéis entenderlo. A lo largo de esos tres
años, es decir, 1975, 1976 y 1977, el destino de los EEUU cambiará, y con el
también el del mundo.
En Corea he estado restaurando por indemnización
todo lo que se perdió en Israel. Preparé y completé el fundamento nacional a
nivel espiritual y físico, mediante el mundo cristiano. También he puesto las
condiciones de indemnización para el nivel mundial.
En estos tres años primeros debemos crear el
fundamento espiritual y en los siguientes tres años el fundamento físico. Por
tanto, desde 1977 a 1981 debemos indemnizar completamente los problemas del
mundo y resolverlos. En los primeros tres años hasta 1977, debemos obtener
cierta victoria, y por el año 1981 debemos haber liberado a la iglesia de
unificación de cualquier oposición en el mundo democrático. Puede que el mundo
comunista siga resistiéndosenos, pero en lo que se refiere al mundo libre deben
recibirnos bien en cualquier parte. Esto se determinará por lo que logremos en
los EEUU.
¿En qué tiempo estamos viviendo? Referente al giro
transicional histórico, hemos heredado de la era cristiano el fundamento
nacional. Debemos añadir asimismo el nivel mundial, no solo espiritual sino
también físicamente. El destino del fundamento mundial se asentará en el
principio de restauración por indemnización. Por tanto, debéis entender
que los años 1975, 1976 y 1977 son los años cruciales de giro transicional en
la historia. Vivimos ahora ese momento.
¿Cómo vamos a influenciar en estos tres años
venideros a los EEUU? ¿Qué debemos hacer? Dios ha dejado de enfocar a las
iglesias cristianas y ha aparecido la iglesia de unificación. Debemos tener una
visión providencial clara de la historia. Debemos entender no sólo la teoría
sino también la realidad de la historia. Jacob anduvo el curso
providencial sin entenderlo demasiado. Ni Moisés ni Jesús hicieron sus cursos
providenciales con pleno conocimiento de causa. Pero nuestra situación es
distinta. Nosotros comprendemos todo, por consiguiente, debemos ser capaces de
hacerlo. La etapa de formación es de Adán, la de crecimiento de Jesús y la
nuestra es la etapa de cumplimiento. Por eso, deberíamos entender
claramente la situación de Dios.
He defendió a una nación, que es Corea, no los
EEUU. No podremos restaurar el cristianismo y el fundamento espiritual a no ser
que volvamos a encontrar la sustancia física de nuevo. ¿Si retrocedéis en
las eras, quién tenía la situación más idónea, Jesús y sus discípulos, o
vosotros? La época de Jesús era en el nivel tribal o nacional, nosotros, en
cambio, nos afirmamos en el nivel mundial. ¡Es un tiempo tan extraordinario!
Debéis entender que en teoría deberíais ser mayores que ellos. Los cristianos
primitivos estaban dispuestos a ir a Roma sabiendo que serían inmolados. ¿Qué
haríais si supieseis que seríais inmolados en Moscú? ¿Sois superiores a
los discípulos de Jesús?
¿Por cuántos años deberíamos trabajar para salvar
el mundo democrático? Debemos trabajar muy duramente los próximos tres años, y
lograr tanto como podamos para ganarnos al mundo comunista en un periodo
de siete años. Di lo hacemos el mundo democrático podrá vencer al mundo
comunista sin necesidad de lucha. Si no lo logramos, habrá lucha tras lucha. En
ese caso, los miembros de la iglesia de unificación deben ir a la victoria
aunque haya que verter sangre. Por consiguiente, debemos resolver los problemas
mundiales por todos los medios. Mi deseo más sincero es siempre ese esté
despierto o dormido. Dios y Jesús también anhelan lo mismo. Muchas personas
espirituales dependen de nosotros para conseguir esta victoria adicional.
Nosotros y el mundo espiritual estamos orando por esto. En el pasado el mundo
espiritual no podía asistirnos plenamente, pero ahora pueden absolutamente
participar Todo depende de que nosotros abramos el camino. ¡Qué cerca está el
Reino de los Cielos! Nos quedan siete años.
El estadio de los Yankees
¿Cuáles son los momentos de cambio en esta batalla?
La conferencia del Madison Square Garden produjo un cambio espiritual. El reto
es ahora el mundo exterior. La conferencia del Madison Square Garden es la
etapa de crecimiento. La victoria mundial se jugará en la próxima conferencia
en el estadio Yankee. Normalmente, el momento transaccional en la providencia
es la segunda etapa. En la familia de Adán, la providencia se centró en Abel,
el segundo hijo. A escala familiar, los cielos y la tierra fueron divididos
centrado en Noé. La segunda etapa es la más crucial. En la familia de
Abraham, se tuvo que tomar una decisión de vida o muerte en torna a la segunda
generación, Isaac. Jesús, el segundo Adán, intentó, en un ámbito mayor de
la historia, darle la vuelta a la historia, pero no pudo. Visto tanto
horizontal como verticalmente, la segunda etapa está en el centro.
El momento de transición a escala mundial es ahora
la conferencia clave del estadio de Yankee. El número siete representa la
formación, catorce el crecimiento y veintiuno el cumplimiento. Por tanto,
si podemos reunir a 210.000 personas en el estadio Yankee seremos victoriosos.
Lograr eso equivale a revitalizar los EEUU. Por eso, lo conseguiremos a riesgo
de nuestras vidas. Debemos ganar la victoria en el estadio Yankee.
Debemos concentrarnos en el Reino de los Cielos no sólo con toda nuestra mente,
sino también con todo el cuerpo. ¡Si reunimos a todos en el estadio
Yankee, qué deleitado estarían Dios y Jesús! El mundo espiritual entero estará
agradecido. Disminuirán los grupos que se nos oponen.
Debéis entender que me encuentro en una posición
seria. Por primera vez, estoy espiritualmente sobre el fundamento mundial y
ahora debo supervisar el fundamento físico. Si conseguís ser victoriosos en
estos tres años venideros, por el año 1980 seremos seguramente capaces de
proteger todos esos fundamentos. Podremos testificar ante Dios que pudimos
resolver todos los problemas del mundo sin lucha. Si podemos traer a más de
200.000 personas al estadio Yankee, triunfaremos en el monumento Washington y
conseguiremos 600 o 700.000 personas. Cuando 600.000 personas me apoyen, el
nuevo Israel podrá ir rumbo a Canaán.
Crearemos el fundamento mundial en estos tres años.
Estamos restaurando por indemnización. En Corea congregamos a 1.200.000
personas en una concentración en la isla de Yoido. Si tenéis el mismo corazón
que Jesús y os unís en un esfuerzo desesperado el mundo espiritual será
movilizado y obtendremos la victoria. La gente se sentirá atraída
inconscientemente al estadio yankee. Os querrán seguir en cuanto os vean. Serán
llevados por el mundo espiritual. Por eso, debemos hacer nuestro mejor. Es la
batalla final. No existió antes ni volverá nunca. Dios, Jesús y yo estamos
serios, los cristianos en el mundo espiritual y vosotros miembros de la iglesia
de unificación estáis serios. Los que pasaron al mundo espiritual creyendo en
el cristianismo vendrán en nuestra ayuda. Después de que los cristianos
penetraron en Roma, la persecución no duró mucho. Si ganamos la victoria
en el estadio yankee, no habrá tanta oposición. De alguna manera, la gente se
sentirá atraída hacia la iglesia de unificación y vendrán a observar qué somos
y qué hacemos.
La victoria del estadio Yankee nos pondrá por
encima de la etapa de crecimiento. Es equivalente a ir más allá del ámbito de
la caída. Puesto que establecerá la autoridad de Dios a escala mundial, Satán
no tendrá a donde ir. En consecuencia, nuestros enemigos no podrán oponérsenos.
Todo eso se decidirá en el estadio Yankee. Me siento, en cierto sentido,
desesperado. ¿Qué ocurrirá si fracasamos? Ese punto me preocupa mucho. Lo
debéis entender. Debemos lograrlo por todos los medios, pase lo que pase.
Los EEUU tendrán pronto 200 años de edad.
Comprendemos que la providencia de Dios se desarrolla mediante periodos de
tiempo paralelos. Los primeros cristianos restauraron por
indemnización los 4.000 años de historia humana, perdidos en tiempo de Jesús,
durante los 400 años de persecución del Imperio Romana. Ahora les toca a los
EEUU restaurar los 2.000 años perdidos por el fallo del cristianismo.
Esos 200 años deben consumar espiritual y sustancialmente la providencia desde
Jesús, resolverlo todo, y devolverlo a Dios. Esos 200 años son el periodo de
indemnización para restaurar el espíritu y la carne de Jesús.
El t5ítulo de la conferencia en el estadio Yankee
es:” El bicentenario de América, Dios bendiga a América”. Significa que estamos
trasladándonos al Reino de los Cielos., superando la cima de la segunda etapa
providencial. Incluso mientras durmáis, hacedlo con la mente puesta en y
dirigiendo vuestros brazos y piernas al estadio Yankee. Si pensamos de esa
forma, la victoria estará asegurada. Si tenéis éxito os elevaréis. También Dios
y el mundo espiritual lo harán.
Es el tiempo en que podéis centraros en los 6.000
años de historia con la máxima sinceridad y convertiros en el cuerpo resucitado
de Jesús. Es un hito reciente en la historia de la providencia, que nunca jamás
reaparecerá. Hacer lo mejor que podáis. Si Dios tuviera que preguntaros:” ¿No
podríais haber hecho más? ” Y podéis responder:” He hecho el máximo de mis
posibilidades”, vosotros y yo estaremos libre de responsabilidad. Pero si no
hacéis lo mejor con la máxima sinceridad seréis objeto de resentimiento de
miles de millones de generaciones. Vosotros y yo debemos unirnos completamente.
Satán no se toma un descanso, ni tampoco Dios, nosotros tampoco podemos. Pensad
en esos términos, y en losa siguientes seis meses, que serán el infierno final.
Debéis superar seriamente todos los obstáculos. Este tiempo no se repetirá.
Hagamos lo mejor que podemos y prometamos frente a Dios que en seis meses desde
hoy vamos a cumplir nuestra meta.